Informe. Todas las claves del enfrentamiento entre Luis de Guindos y Cristóbal Montoro. El ministro de Economía se ‘salta’ la Comisión Delegada para eludir el control de Hacienda
Pese a que públicamente están obligados a mantener las formas, la relación entre Luis de Guindos y Cristóbal Montoro sigue siendo complicada. Hay una pugna interna y Mariano Rajoy no quiere decantarse por ninguno de ellos. Es más, dejará caer a cualquiera de los dos, en función del rumbo que tome la situación económica.
El Confidencial Digital ha contrastado con altos cargos del Gobierno la existencia de ese enfrentamiento entre los dos ministros económicos. Y, a partir de esas fuentes, puede trazar cuáles son las claves de la ‘pelea’ entre ambos.
La ausencia de un mando único al frente de la política económica se está dejando notar demasiado.
El ministro de Economía, Luis De Guindos, no renuncia a ser él quien lleve la voz cantante, lo cual genera continuos choques con el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro.
Esas diferencias fueron más intensas al principio y con el tiempo las asperezas se van limando, aunque todavía existe falta de cohesión entre los dos.
Difícil aterrizaje de Luis de Guindos
Según relatan las fuentes del Gobierno a las que ha tenido acceso ECD, la llegada de Luis de Guindos al Gobierno fue “traumática”. Esperaba ser él quien llevara las riendas de la economía y por eso le costó encajar que Mariano Rajoy se reservase la dirección de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos, el verdadero poder que han asumido hasta ahora los vicepresidentes económicos Rodrigo Rato, Pedro Solbes y Elena Salgado.
Por el contrario, Cristóbal Montoro, un hombre del partido, sabía con más exactitud dónde se metía. Daba por descontado que el presidente del Gobierno querría asumir el timón de la política económica cuando llegara a La Moncloa.
Y es que opina, como Rajoy, que, si el problema central del país es la economía, el jefe del Ejecutivo debe cargar en primera persona con esa responsabilidad.
Debe medir sus palabras
En el equipo de Montoro tampoco gustan algunas de las intervenciones públicas del ministro de Economía y Competitividad.
Le echan en cara que le está costando olvidar su anterior condición de reputado experto del IE Business School, cuando daba conferencias y emitía dictámenes y opiniones.
Consideran que ahora, desde su posición de ministro, tiene que tener presente que sus palabras tienen mayor repercusión, y que cuando habla lo hace siempre en nombre del Gobierno. Creen que aún no ha asumido del todo los límites.
Aunque Cristóbal Montoro asume que De Guindos tiene el cometido, dado por Rajoy, de lanzar los mensajes a Bruselas y a los mercados internacionales, según esas fuentes el titular de Hacienda esta “calcinado” por tener que salir, en innumerables ocasiones, a matizar y corregir a su colega el ministro de Economía por levantar ‘polvaredas’ dentro de España con alguno de sus mediáticos anuncios.
Se salta la Comisión Delegada
Pero hay ‘choques’ más concretos entre los dos cerebros económicos. Según las fuentes consultadas por ECD, Luis de Guindos intenta en ocasiones ‘colar’ decisiones en el Consejo de Ministros que previamente no han pasado el filtro, ni de la Comisión de Subsecretarios, ni de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos: las lleva directamente a la discusión por el Gobierno en pleno.
No obstante, Montoro ya ha encontrado la manera de ‘frenar’ algunas de las iniciativas que el ministro de Economía pretende incluir en el orden del día de las reuniones de los viernes.
Considera que a él le corresponde, como responsable de Hacienda y Administraciones Públicas, evaluar el impacto presupuestario de todas las medidas económicas que debe adoptar el Gobierno y que se debaten en el Consejo de Ministros.
Tampoco se ponen de acuerdo en las reformas
De Guindos tampoco está de acuerdo con un buen número de las decisiones que toma su ‘compañero’ Montoro. El titular de Hacienda es el cerebro de las medidas de ajuste de carácter económico que ha tomado el Gobierno y que, por tanto, han marcado también al ministerio de Economía.
De Guindos es de la opinión de que, en algún momento determinado hay que pisar el freno a las reformas. Considera aceleradas y agresivas algunas de las medidas adoptadas por Hacienda.
Montoro, por su parte, es de la opinión contraria: las medidas de ajuste hay que ponerlas en marcha cuanto antes. Y su criterio se está imponiendo, hasta ahora, a la opinión de De Guindos.
