Fernández Ordóñez, dispuesto a que la salida a Bolsa de Bankia triunfe: forzará que sea la primera y pondrá sobre la mesa los 15.000 millones para las cajas
Miguel Ángel Fernández Ordóñez ha puesto sus ojos en la inminente salida a Bolsa de Bankia. El Gobernador del Banco de España no quiere sorpresas de última hora. Es consciente de que los procesos en marcha ahora mismo en el sector financiero dependen, en gran medida, de la suerte que corra la entidad que preside Rodrigo Rato en los mercados de capital.
Fuentes financieras consultadas por El Confidencial Digital explican que España se la juega en el éxito de la salida a bolsa de Bankia. Por ello, el Banco de España concentra ahora todas sus energías en que la puesta de largo en los mercados del nuevo banco liderado por Caja Madrid y Bancaja sea del todo favorable.
La credibilidad de la reforma del sistema financiero español va a depender, en gran parte, de la acogida que tenga el estreno de Bankia. El número de entidades involucradas en la operación da una idea del esfuerzo que hará el supervisor por garantizar el éxito de la operación.
Uno de los contratiempos que puede encontrarse Bankia en su periplo en busca de inversores son los resultados de las pruebas de estrés a la banca -que se harán públicos en las próximas semanas- justo antes de la colocación de sus acciones. En los despachos del Banco de España se trabaja a contrarreloj para que está circunstancia no altere, en absoluto, los planes de la entidad que preside Rodrigo Rato.
Las mismas fuentes añaden que la fórmula que propone Fernández Ordóñez para que las entidades con problemas salgan bien paradas en las nuevos test de resistencia es que se puedan computar los recursos que aportaría el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en las entidades, aunque no hayan sido desembolsados todavía de manera efectiva.
El Banco de España cifró hace unos meses el capital que necesitan las cajas que no llegan a las nuevas exigencias en casi 15.000 millones de euros. Un importe que, según fuentes cercanas al órgano regulador, el FROB estaría dispuesto a aportar ya mismo en caso de que fuera necesario.
Según las fuentes consultadas, Rodrigo Rato pretende ser el primero en cotizar, sobre todo, por los recelos de los inversores ante las cajas españolas y las dificultades que habrá para lograr el dinero necesario para cumplir las exigencias de capitalización.
El gobernador del Banco de España atenderá esta petición del presidente de Bankia maniobrando para que sea la primera en salir en busca de capital con el pretexto de que la estabilidad del resto del sistema financiero español está en juego, y pasa por el triunfo de esta operación.
La entidad aspira a colocar en el mercado entre 3.000 y 4.000 euros, un rango muy amplio que da una idea del margen que se quiere dar la entidad en previsión de las dificultades que pueda encontrar, ya que el reto de vender un negocio bancario español del que muchos inversores extranjeros recelan en este momento no será tarea sencilla. Bankia necesita reforzar su capital en 1.795 millones de euros si sale a Bolsa, y 5.775 si no lo consigue.
