Goirigolzarri descarta convertirse en el primer ejecutivo de Bankia con Rodrigo Rato. BBVA le tiene atado con una jubilación de 3,5 millones anuales y no le apetece
Rodrigo Rato busca consejero delegado para Bankia. Este hecho ha traído a actualidad el nombre de José Ignacio Goirigolzarri, ex número dos del BBVA, y su posible fichaje para el puesto. Sin embargo, el ejecutivo vasco concentra ahora sus esfuerzos en proyectos empresariales lejos del sector bancario. La entidad que preside Francisco González le tiene atado con una jubilación de 3,5 millones al año.
El pacto de salida de José Ignacio Goirigolzarri con el BBVA le obligaba a no trabajar en ninguna entidad financiera durante un periodo de dos años, que vence el próximo 29 de septiembre.
Sin embargo, fuentes cercanas al ex directivo, a las que ha tenido acceso El Confidencial Digital, explican que no está entre sus planes la vuelta a la banca para convertirse en la mano derecha de Rodrigo Rato en Bankia, la nueva entidad liderada por Caja Madrid.
Las mismas fuentes comentan que a Goirigolzarri le apetece ahora “mucho menos volver a las andadas”, atendiendo al contexto de incertidumbre en el que se mueve el sector. También pesan para el ex directivo la confidencialidad y la fidelidad a la que ha sido su casa durante 30 años, sus ocho últimos como primer ejecutivo de la entidad.
Según las fuentes consultadas, en este momento se encuentra “muy a gusto” trabajando en la fundación Garum Fundatio, en la que lleva dedicado desde mediados del pasado año, y que se propone fomentar la creación de empresas y apoyar a emprendedores en España y Latinoamérica.
Goirigolzarri dejó el cargo en el BBVA a finales de 2009 por jubilación anticipada. Según lo acordado entre ambas partes, el directivo percibe una pensión anual del 80% de su sueldo base (4,28 millones en 2008), una cantidad cercana a los 3,5 millones anuales. Transcurridos los ocho años que quedan para que cumpla 65 años –ahora tiene 57-, recibirá los 52,49 millones de euros que BBVA le tiene asignado en concepto de jubilación.
Fuentes del sector financiero consultadas por ECD analizan que el fichaje de ‘Goiri’ por Bankia también encuentra un obstáculo económico. Rodrigo Rato tendría muy complicado superar los 3,5 millones al año de jubilación pactados entre el BBVA y su ex ‘número dos’ tras su salida.
La oferta del nuevo banco liderado por Caja Madrid debería superar esa cifra para que pudiese comenzar a ser atractiva para el ex banquero. A todo esto hay que añadir que Goirigolzarri podría perder la cantidad asignada en el pacto de salida con BBVA si decide comenzar a trabajar para la competencia.
La disposición de Francisco González a permanecer hasta los 70 años al frente del banco frustró las aspiraciones de José Ignacio Goirigolzarri de convertirse en presidente a corto plazo y provocó su dimisión. Además, las discrepancias entre ambos directivos respecto al desarrollo futuro y la gestión de la entidad también propiciaron su salida.
Hace unas semanas, Goirigolzarri también se postuló como recambio de Alfredo Sáenz, consejo delegado del Santander, tras la sentencia del Supremo que podría inhabilitarle en el cargo.
