Madrid-Túnez-Madrid: una semana, hotel de cuatro estrellas, 180 euros. Ofertas increíbles para recuperar el turismo perdido tras las revueltas árabes
Egipto y Túnez, los dos destinos más importantes del norte de África, no están dispuestos a dar por perdida por temporada estival de 2011. La llegada de turistas a ambos países ha caído drásticamente durante el primer trimestre del año tras las revueltas populares pero preparan ofertas agresivas de cara el verano para volverse a posicionar en el mercado turístico mundial.
Según ha podido saber El Confidencial Digital, las agencias de viajes españolas están constatando "ofertas salvajes" a Egipto y Túnez para el próximo verano con el objetivo de impulsar la recuperación de estos dos destinos de sol y playa tras las revueltas árabes de principios de año.
Los touroperadores turísticos europeos están ofreciendo paquetes a muy bajo precio para tratar de estimular la demanda hacia Egipto y Túnez después de la reanudación de los viajes a estos dos destinos. Están comenzando a lanzar ofertas agresivas como: ‘1 semana, en un hotel de cuatro estrellas en Túnez, por 180 euros’. También están valorando la opción de suspender las tasas de vuelo a estos territorios.
Según los datos que maneja el sector, estos dos países del norte de África presentan siempre productos entre un 40% y un 50% más baratos a los paquetes similares en España. En esta ocasión, según estas mismas fuentes, están preparando rebajas de precios de hasta un 70%".
Fuentes del sector de las agencias de viajes consultadas por ECD explican que estas ofertas y recortes en las tasas supondrán que el fuerte trasvase de turistas europeos desde estos destinos amenace en la época estival la llegada de turistas a las Islas Canarias, beneficiadas hasta ahora por la inseguridad en el mundo árabe.
Los hosteleros prevén que a medida que la situación en Túnez y Egipto se vaya normalizando –hasta ahora las reservas para este verano no llegan al 40%- se producirá un fuerte efecto rebote y se iniciará una batalla por los precios de los servicios entre España y estos dos destinos.
Esta situación preocupa a los empresarios españoles, que no pueden competir con esos precios tan bajos. Según las fuentes consultadas, España no debe ponerse al mismo nivel de precios en el que se posicionarán estos territorios porque la estrategia turística española se basa en la calidad de las infraestructuras tanto públicas como privadas, así como en la seguridad jurídica y médica.
