Novedades en las reclamaciones sindicales de patrimonio histórico: la CGT exige expedientes perdidos; la CNT se queja del celo de Caldera

Las reuniones entre el departamento que dirige Jesús Caldera y miembros de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) tienen una periodicidad mensual. La última tuvo lugar el pasado 29 de mayo. En este encuentro se revisaron cerca de 160 de los 3.000 expedientes presentados en relación a las cuentas bancarias confiscadas, reclamación que el sindicato ha valorado en 90 millones de euros. También se analizaron 40 de los 1.500 expedientes de inmuebles.   Desde la CNT no se deja mucho espacio al optimismo. El próximo encuentro entre la central anarcosindicalista y el Ministerio tendrá lugar el 27 de junio. Y continuarán mensualmente, hasta llegar a una solución. La principal crítica de la CNT es que “los políticos no quieran efectuar una valoración global de los bienes y evitarse complicaciones”. Recelan del empeño fiscalizador que demuestra Trabajo.   Sin embargo, según las informaciones recogidas por El Confidencial Digital, el Ministerio de Trabajo estaría muy interesado en resolver cuanto antes este primer bloque de reclamaciones. La decisión podría adoptarse incluso antes del mes de agosto. El motivo: UGT también saldría beneficiado de este paso. Para que esto se produzca, deberán resolver primero la Abogacía del Estado y la Intervención General del Estado. Posteriormente, el Consejo de Ministros deberá dar el visto bueno a la operación.   Además de las cuentas bancarias y los inmuebles reclamados, la CNT espera que Jesús Caldera avale también la devolución de otros bienes muebles y mejoras materiales de inmuebles –aquí se suma, por ejemplo, solicitudes de la Unión General de Trabajadores (UGT)- y material propagandístico de la Guerra Civil, en posesión de la Fundación Pablo Iglesias. En total, la CNT ha presentado desde enero 5.047 informes para que sean estudiados, valorados económicamente y, finalmente, aceptados.   Por otro lado están las reclamaciones de la CGT, órgano sindical que se separó de la CNT en 1979 con la llegada de la democracia. Esta institución ha presentado casi 140 reclamaciones de sus sindicatos miembros donde reclaman diferentes edificios ubicados en La Coruña, Sevilla, Valencia, Alcoy (Alicante), Mataró (Barcelona) o Villaverde (Madrid). El conflicto aquí surge a la hora de comprobar qué bienes reclamados pertenecen al sindicato y cuáles no.   En este sentido, desde la CGT se exige al Ministerio que dirige Jesús Caldera la entrega de una serie de expedientes que permitirían al sindicato demostrar la titularidad de diversos bienes que pertenecieron a la organización. Unos informes que están precisamente en el Ministerio. De hecho, aseguran, la CGT no puede concretar el contenido de su reclamación al no disponer de esos datos.   De momento, los representantes de esta organización se han reunido al menos en dos ocasiones con responsables de Trabajo para reclamar esos escritos; por ahora, de manera infructuosa. “Si nos niegan los expedientes estamos dispuestos a recurrir a la vía judicial y política”, concluyen las fuentes sindicales.