Se hicieron amigos cuando llevaban la cartera de Economía

Pedro Solbes ha salido de Enel tras perder el apoyo de un ex ministro de Berlusconi

Domenico Siniscalco, quién le colocó en la eléctrica italiana propietaria de Endesa, ha dejado la presidencia del grupo de fondos que lo aupó como consejero

Pedro Solbes, ex consejero de Enel.

Sorpresa en el sector por el cese de Pedro Solbes como consejero de Enel. Altos directivos de la eléctrica italiana daban por hecho su renovación hace unos días. Pero el ex vicepresidente económico se ha quedado sin uno de los apoyos que resultó clave para su designación: el del ex ministro de Finanzas con Berlusconi, Domenico Siniscalco.

Solbes fue propuesto hace tres años por varios fondos de inversión independientes para entrar a formar parte del consejo de la eléctrica italiana Enel, que controla el 92% del capital de Endesa, la compañía que preside Borja Prado.

Concretamente, el ex vicepresidente económico con Zapatero fue designado por la Asociación de Gestores de Fondos (Assogestioni), presidida entonces por el ex ministro italiano de Finanzas, Domenico Siniscalco.

Pedro Solbes mantiene una estrecha amistad con el ex ministro de Berlusconi entre 2004 y 2005. Una relación que perduró también en los tiempos en los que la italiana se impuso a la alemana E.ON en la pugna por Endesa. Solbes fue el titular de Economía en el Gobierno de España entre 2004 y 2009.

Siniscalco dejó la presidencia de Assogestioni

Pero un reciente cambio en la presidencia de la Asociación de Gestores de Fondos (Assogestioni) ha trastocado todos los planes del ex vicepresidente.

Domenico Siniscalco, el ex ministro de Berlusconi que lo aupó en 2011 al consejo de Enel, abandonó la primera línea de la organización. Renunció al cargo en noviembre pasado después de las críticas suscitadas por su doble papel en Telecom Italia.

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El ex ministro de Economía italiano es, de hecho, también el presidente de Morgan Stanley en Italia. Es el banco en el que los antiguos monopolistas de las telecomunicaciones tiene un mandato para la conversión y la venta de las torres.

Un papel que entraba en conflicto de intereses con el de presidente de la asociación que recoge los fondos presentes a su vez en el capital de Enel.