Aerolíneas, telecos y eléctricas podrán ‘bombardear’ con publicidad a los clientes que no lo rechacen expresamente
La Agencia de Protección de Datos ha establecido que el usuario tiene que desactivar la opción de no recibir información comercial tras la reclamación de un pasajero de Ryanair. Vea la resolución
La Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y del Comercio Electrónico (LSSI) permite enviar mensajes a los usuarios, siempre y cuando se refieran a productos parecidos a los contratados. Así ha quedado establecido en una resolución de la Agencia Española de Protección de Datos sobre una reclamación presentada contra Ryanair
La resolución de la AEPD, amparándose en el artículo 21 de la LSSI, afirma que continúan “siendo válido el envío de comunicaciones comerciales por medios electrónicos a clientes de una compañía, sobre productos y servicios similares a los contratados, siempre que se le facilite un mecanismo de oposición a las mismas en el momento de la recogida de los datos”.
Así las cosas, los mensajes sobre productos similares a los contratados siempre -durante el tiempo que se realice la comunicación- deberán contar con la opción de oponerse a seguir recibiendo estos correos.
Archivada una reclamación contra Ryanair
Con esta argumentación, la Agencia de Protección de Datos acaba de archivar una reclamación contra Ryanair por enviar el envío de comunicaciones comerciales sin solicitar la autorización del usuario.
En la queja interpuesta, el usuario indicaba que, una vez sacados los billetes, la aerolínea solicitaba activar una casilla de verificación para no recibir publicidad, en vez de venir desactivada por defecto y necesitar verificarla para recibir la información comercial.
Ryanair anuncia en el momento de comprar los billetes que: “Nuestros suscriptores reciben las mejores ofertas de Ryanair y Lauda por correo electrónico, SMS, notificaciones push, teléfono. Si no deseas recibir ofertas, marca esta casilla”.
Por lo tanto, las aerolínea no está pidiendo al reclamante consentimiento para envío de correos comerciales o llamadas telefónicas publicitarias, sino ofreciendo el derecho de oposición a dichos envíos y llamadas en el momento de producirse la compra de los billetes.
