Los datos de la renta mínima que prepara el Gobierno: 430 euros y para 1,8 millones de hogares

La cantidad es más baja de lo demandado por Pablo Iglesias. El borrador, ya ultimado por el Ministerio de Seguridad Social, incluye 100 euros por hijo hasta un máximo de tres y no se exigirá estar en el paro

José Luis Escrivá, ministro de Seguridad Social.
José Luis Escrivá, ministro de Seguridad Social.

El Gobierno tiene prácticamente cerrada la renta mínima. Alcanzará a casi dos millones de hogares vulnerables. El borrador que ultima el Ministerio de Seguridad Social rebaja sensiblemente la cuantía de la prestación que había propuesto la Vicepresidencia de Derechos Sociales de Pablo Iglesias, que partía de un mínimo de 500 euros.

Se trata de una medida que acordaron PSOE y Podemos en su pacto de Gobierno, y que ahora la presión de Iglesias, por la crisis económica y social provocada por el coronavirus, ha obligado a tramitar con más rapidez de la que pretendía el ministro José Luis Escrivá.

Una prestación de 430 euros

Confidencial Digital ha tenido acceso al borrador final de la medida que perfila estos días a contrarreloj el equipo de Seguridad Social. Uno de los requisitos fundamentales que tiene en cuenta es la renta por hogar (en lugar de por individuo), a la vez que establece tramos por renta (para evitar que se perciba o toda la prestación o ninguna).

Fija una ayuda con dos tramos: uno, para quienes se encuentran en peor situación, que consiste en una cuantía equivalente al 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples, IPREM, (en 2019, unos 430 euros al mes); más un complemento de 1.200 euros al año por hijo a cargo, con un máximo de tres.

Por debajo de la demanda de Iglesias

Hasta el momento, el Ministerio de Seguridad Social no ha querido confirmar oficialmente a cuánto puede ascender la prestación, pero se toma como referencia la cuantía media de las prestaciones autonómicas, que se sitúa en los 463 euros.

El borrador con el que trabajan los técnicos del Ministerio, al que ha tenido acceso ECD, establece esa cantidad en los citados 430 euros, por debajo así de las pretensiones de la Vicepresidencia de Pablo Iglesias.

Alcanza a 1,8 millones de hogares

El texto recoge que la medida alcanza a 1,8 millones de hogares, lo que vendría a superar el millón de familias que anunció hace unos días el propio Escrivá y confirmaron después fuentes de Presidencia del Gobierno.

Desde Moncloa se ha señalado en las últimas horas que, como mínimo, la medida alcanzaría a un millón de hogares, aunque tampoco ha descartado que la cifra acabara siendo ligeramente superior.

Rebajará la tasa de pobreza

El borrador de la disposición destaca también que ese diseño permitiría reducir la pobreza severa hasta en un 60%, dejando su tasa en el 2,7%, lo que situará a España ocho décimas por debajo de la media de la Unión Europea.

 

Recuerda el documento que España es el segundo país de la UE, solo por detrás de Rumanía, con la tasa más alta de pobreza severa: del 6,9% frente al 3,5% comunitario.

Se entiende por pobreza severa la que afecta a las personas con una renta un 30% por debajo de la mediana de ingresos disponibles del país, lo que en este caso equivaldría a ganar menos de 355 euros al mes por individuo o 746 euros para un hogar de dos adultos y dos niños.

Elimina la condición de estar parado

Una de las principales novedades es que la medida plantea un sistema de renta mínima a nivel estatal que sea compatible con salarios bajos, para así no desincentivar la participación en el mercado laboral.

Para ello, elimina la condición de ser parado de larga duración o estar inscrito en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), de tal forma que la ayuda sea compatible con el empleo hasta un cierto umbral de sueldo, que por ahora no cuantifica.

Este modelo ya se ha demostrado efectivo en el País Vasco. Permitiría reducir los desincentivos a participar en el mercado laboral y evitaría alterar las cifras de desempleo, ya que los beneficiarios no tendrían que inscribirse como parados para poder percibir la ayuda.

Una vía de financiación permanente

Uno de los interrogantes, y más teniendo en cuenta que los ingresos públicos se van a desplomar como consecuencia de la crisis del coronavirus, es cómo va a financiarse la medida. Un aspecto que por ahora no recoge el borrador que está cerrando el equipo de Seguridad Social.

La medida no viene acompañada de una memoria económica, pero fuentes conocedoras de los trabajos calculan un coste inicial para el Estado superior a los 5.000 millones de euros.

Los técnicos de Seguridad Social reconocen que el hecho de que vaya a ser una medida permanente, como siempre ha defendido José Luis Escrivá, hace que se convierta en estructural y no en un desembolso momentáneo y circunscrito a esta crisis. Por lo tanto, admiten que el Gobierno tendrá que buscar una vía de financiación permanente.

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