Los carteros dejan los paquetes en las puertas de las casas (y se van) para evitar contagios
Instrucciones al personal de Correos: identificar al destinatario, colocar el envío en un punto a su alcance y retirarse. Orden de no manipular dinero en efectivo en reparto
Tras la publicación del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19, Correos trabaja para garantizar la prestación del Servicio Postal Universal como tiene encomendado.
El resultado de estas medidas es que este lunes, primer día laborable tras la declaración del estado de alarma, se atendió a un total de 88.000 personas, frente a las 300.000 personas que habitualmente se atienden en la red de oficinas.
La gran mayoría de las operaciones corresponden a servicios de necesidad, principalmente el envío de dinero mediante giros postales, servicio enmarcado dentro del servicio postal universal.
Medidas de prevención en los domicilios
Confidencial Digital ha tenido acceso a las instrucciones remitidas a la plantilla dedicada a los repartos en las últimas horas. Recogen que el personal de Correos, cuando haya recogido la información del receptor (nombre, apellidos y DNI), dejará el envío en un punto al alcance del receptor (felpudo, suelo, mostrador) y se retirará del mismo.
No habrá contacto físico con el cartero ni con la PDA y los envíos se entregarán respetando la distancia de seguridad mínima de al menos 1 metro.
Además, temporalmente no se encuentra disponible la modalidad de pago ‘Contra Reembolso’ en los envíos a domicilio (en los envíos a entregar en oficina SI) ya que el personal de Correos tiene instrucciones de no manipular efectivo en reparto.
Medidas de seguridad en las oficinas
Por tanto, como ya es conocido, Correos solo presta el servicio postal público, para lo que ha implementado nuevas medidas organizativas y protocolos de actuación. Solo está operativo el personal estrictamente imprescindible para la prestación del servicio público, único servicio que se está desarrollando.
Las oficinas de Correos están abriendo de 09:30 a 12:30, de lunes a viernes, guardando todos los protocolos dictados por las autoridades sanitarias.
Todas las entregas se deben completar sin que el cliente interactúe con la tableta de firma. Para ello, en el momento en que salte la tableta se seleccionará la opción “firma en papel”.
El empleado deberá presionar en cualquier punto de la tableta dando por finalizado el proceso. No será necesario recoger la firma en papel, simplemente se identificará al cliente.
Todo el intercambio se tiene que realizar dejando documentos, cartas, paquetes, tickets, dinero, etc. en el mostrador. Nunca se debe establecer contacto físico directo entre empleados de Correos y la persona destinataria del envío.
Para evitar aglomeraciones en las oficinas, no puede haber un número de clientes por encima del 50% del espacio de vestíbulo. Una vez que se supere dicha capacidad, el gestor del vestíbulo debe invitar a los clientes a que permanezcan en el exterior de la oficina manteniendo la distancia de seguridad de al menos un metro.
