Garzón recaudó 55 millones en sanciones a juegos de azar en su primer año como ministro
Consumo casi duplica la cantidad cobrada en multas de 2019, cuando el ministerio lo gestionaba el PSOE. Caen las apuestas deportivas en 2020
Alberto Garzón ha colocado en la diana a los operadores de juegos de azar ‘online’ y presenciales, operen en internet o en los barrios de ciudades y pueblos. Desde que asumió la cartera de Consumo en enero de 2020, el ministro de Unidas Podemos mantiene una disputa por regular esta publicidad. Y ya ha ganado una batalla, al prohibir los anuncios de apuestas en las retransmisiones de competiciones deportivas salvo en horario nocturno, de 1 a 5 de la madrugada.
El real decreto de Comunicaciones Comerciales de las Actividades del Juego descolocó en noviembre de 2020 al mundo del deporte, maniatado en sus ingresos por la inversión en patrocinios de los sitios de apuestas. Consumo concedió unos meses a los equipos y a las televisiones y radios para despojar de mensajes comerciales las camisetas o las pausas publicitarias. El plazo concluyó en agosto.
Una decisión que complementa a las medidas de alejar los locales de apuestas de los colegios o atender las denuncias de los ciudadanos contra el azar en plena pandemia. En conjunto, las sanciones al sector han supuesto casi 56 millones de euros. Así lo refleja el balance del primer año del líder de Izquierda Unida al mando del ministerio.
El Ministerio de Consumo recaudó 55.839.370 euros con 240 expedientes sancionadores el año pasado, según los datos de la Memoria de Actividad 2020, elaborada por la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) y publicada el 3 de diciembre de 2021.
A lo largo del año se abrieron 197 nuevos expedientes a operadores de juego. 33 respondieron a causa muy grave, 30 fueron graves y 134, la mayoría, entraron en la categoría leve. Once de las sanciones derivaron en inhabilitación por dos años. Sólo se archivó, sin castigo, una.
23,5 millones más que la socialista Carcedo
En la Memoria de Actividad, de 21 páginas y a la que ha accedido Confidencial Digital, se especifica que la DGOJ se encarga de tramitar las infracciones administrativas graves y leves, en tanto el ministro Garzón asume los expedientes muy graves, aunque delega la competencia en la Secretaría General de Consumo y Juego.
Una infracción se comete si el operador trabaja sin licencia, paga tarde los premios, manipula los sistemas de juego, deja participar a personas que no cumplen los requisitos, presta dinero al cliente para que apueste o incumple las restricciones a la publicidad.
En comparación con 2019, las resoluciones han crecido en la cantidad recaudada y en el número de sanciones. Bajo el mandato de María Luisa Carcedo, del PSOE, se notificaron 146 multas que generaron 32.394.600 euros, casi la mitad de la recaudación de Garzón. De los 234 expedientes iniciados ese año, el Ministerio de Hacienda cursó 22 contra establecimientos sin licencia.
Consumo entonces compartía funciones con Sanidad y Bienestar Social, empaquetados en una misma cartera durante la primera legislatura de Pedro Sánchez en el Gobierno. Carcedo reemplazó a la titular elegida por Sánchez, Carmen Montón, tras la moción de censura a Mariano Rajoy. Montón había dimitido en septiembre de 2018, a los 101 días de asumir el cargo, por plagio en un trabajo de máster universitario.
Los españoles apostaron 850 millones
La Memoria de Actividad de 2020 ayuda a calibrar el estado de las apuestas en España. Más de 850 millones de euros invirtieron los usuarios en probar fortuna. Espoleadas por el confinamiento, subieron las modalidades en internet de la ruleta, el póquer y el bingo.
Por contra, disminuyeron las apuestas deportivas en torno al 15% tanto en sitios en línea como en locales físicos, ya que las competiciones permanecieron suspendidas hasta el verano.
Durante el primer año de la pandemia, no obstante, las apuestas continuaron a la cabeza en cuanto a participación, con una fidelidad del 42,9%, por encima del casino (41,2%), el póquer (13%), el bingo (1,9%) y los concursos (0,9%), indica la Memoria.
Los usuarios de juegos de azar tenían a su disposición 49 operadores de apuestas, 10 de póquer, 63 de casino y 3 de bingo. Pero según los datos se clausuraron 180 webs que infringían las normas.
La Dirección General de Ordenación del Juego concede los permisos para operar, además de vigilar y perseguir el juego ilegal en las páginas web de apuestas, casino, póquer, máquinas de azar y bingo, las competencias que atañen al Ministerio de Consumo. Además, controla los sorteos de lotería de SELAE y la ONCE. De las casas de apuestas y casinos presenciales son competentes las comunidades autónomas.
