El Gobierno no ha consultado a Bruselas la bajada del IVA de la luz

El Gobierno de España no ha iniciado consulta alguna al Comité sobre IVA de la Unión Europea (UE) para solicitar la bajada del IVA de la luz a un tipo reducido, según confirman a El Confidencial Digital fuentes de la UE. La consulta a este órgano es un paso necesario para poder cambiar los tipos de IVA.

La decisión del comité no es vinculante ya que este carece de potestad para aceptar o rechazar las medias, simplemente señala las posibles pegas en aspectos jurídicos y tributarios. Con todo, cualquier Estado puede reducir el IVA con un informe desfavorable de la institución, incluso adelantarse a su resolución. Siempre y cuando la medida no implique ayudas de estado.

La directiva europea 2006/112/CE. Artículo 102 es clara al respecto de las posibilidades de aplicar tipos reducidos: “Los países de la UE pueden aplicar tasas reducidas al IVA de la electricidad, siempre que no altere la competencia.” En caso de entrar en conflicto con la legalidad, la bajada del IVA quedaría en manos de un tribunal la Unión quien decidiría si esta vulnera la regulación.

El Gobierno niega poder cambiar el tipo de IVA

La normativa de la Unión Europea sentencia que España puede bajar a voluntad el IVA de la luz. Esta posibilidad contrasta con las declaraciones emitidas por María Jesús Montero, ministra de Hacienda, quien aseguraba que la medida "no estaría en la línea con lo que se marca por parte de Europa".

Además, la ministra señalaba que "España está advertida por parte de la Comisión Europea (CE) por el uso que se hace de forma abusiva o excesiva, respecto al IVA reducido o superreducido".

Sin embargo, este punto queda también en entredicho cuando se acude al Informe País de la CE fechado en febrero de 2020. El documento reconoce que España tiene una recaudación "relativamente baja en concepto de IVA" y que se debe al  "uso generalizado de los tipos reducidos y superreducidos".

Sin embargo, señalan como ejemplos a eliminar el "tipo reducido aplicable a los restaurantes y hoteles", de un 10% ambos y cuyo tipo reducido considera la CE regresivo por no beneficiar a los más pobres. En ningún punto se hace referencia a que no se deban aplicar tipos reducidos al suministro eléctrico.

El país que más IVA paga en la luz

Hay países de la Eurozona que aplican una tasa de IVA menor al tipo general. Como ejemplo están Francia con 5,5% Grecia que tiene un 6%, Italia con 10%, Portugal  tasa un 13% y Alemania un 19%; siendo España uno de los grandes países de la UE que más paga por IVA en la factura de la luz.

Cuando se piensa en el porqué de tal negativa a equipararse con Europa hay que entender que las arcas españolas necesita los ingresos del IVA de la luz, así lo transmitió el Gobierno en una respuesta al Congreso: la bajada del tipo de IVA: "no garantiza una reducción del recibo y sí tendría un fuerte impacto en los ingresos públicos".

Junto al IVA se pagan múltiples subvenciones, peajes e impuestos que suponen más del 50% del precio que paga el consumidor. Según Eurostat la factura española, contando impuestos y el coste del consumo es la quinta más cara de toda la Unión Europea tras Alemania, Bélgica, Irlanda y Dinamarca.

Esto tiene una repercusión para  las familias. España es un país con un 8,3% de sus hogares bajo el umbral de la pobreza energética, es decir que son familias incapaces de pagar una cantidad de energía suficiente para la satisfacción de sus necesidades domésticas o se ven obligadas a destinar una parte excesiva de sus ingresos a pagar la factura energética de su vivienda.

El coste de la luz excesivamente caro también lastra el desarrollo industrial y a las pymes. Antoni Cañete, vicepresidente y portavoz de CONPYMES citaba en una entrevista a Confidencial Digital, el precio de la factura de la luz y el monopolio de las eléctricas como dos de los puntos que les llevaron a montar su propia patronal alejada de la gran empresa, que engloba a las multinacionales del sector de la energía.