Medio centenar de viajeros de Ryanair se amotinan porque la aerolínea se negó a llevar sus maletas

Bloquearon desde la pista el despegue del vuelo Budapest-Las Palmas tras ser informados de que debían dejar en tierra su equipaje por sobrepeso del avión

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Olvasónk, Szabolcs / Index

Los pasajeros del vuelo FR2968, de Ryanair, que cubría la ruta Budapest-Gran Canaria vivieron una auténtica odisea, la tarde del pasado domingo, cuando tuvieron que esperar alrededor de cuatro horas para llegar a Las Palmas sin equipaje.

El incidente apenas ha tenido eco mediático en España, en vísperas de la huelga de tripulantes de cabina, convocada para esta semana.

La aerolínea irlandesa ha tenido que anular cientos de vuelos ante la imposibilidad de cumplir sus planes. Ha cancelado 400 vuelos con destino o llegada a los aeropuertos españoles, lo que afectará a 75.000 clientes, aunque la compañía asegura que ya ha reubicado al 90% de los afectados.

50 pasajeros bloquean el despegue

Según han destacado varios medios húngaros, un grupo de pasajeros que volaban este domingo de Budapest a Las Palmas se rebeló ante la decisión de Ryanair de no permitirles viajar con sus maletas facturadas.

El vuelo tenía programada su salida del aeropuerto Internacional Liszt Ferenc de Budapest a las 13:30 (hora local) para aterrizar a las 17:55 horas (hora insular) en Gran Canaria.

Cuentan que, cuando todos los pasajeros se encontraban ya en el interior del avión, la aerolínea comunicó a los pasajeros que deberían viajar sin equipaje. Alegó que la aeronave llevaba sobrepeso.

Se procedió en ese momento a la retirada de todas las maletas de la bodega. La compañía garantizó que las maletas llegarían a Las Palmas en unos días. El próximo miércoles era la primera fecha que se dio a los viajeros.

En ese instante, según informan también los medios locales, alrededor de medio centenar de pasajeros se negaron a volar sin su equipaje: descendieron por la escalerilla y se plantaron delante del avión para evitar que pudiera despegar.

Tuvo que intervenir la Policía Local

El incidente obligó a intervenir a la Policía de Budapest, lo que provocó que el piloto anunciara posteriormente que las maletas llegarían el mismo domingo a España.

Algunos viajeros comenzaron a recoger de sus maletas las pertenencias necesarias para sobrevivir durante los días antes de recuperar el equipaje (bolsas de aseo, ropa interior...).

 

Aún así, una treintena de personas que bajaron del avión se negaron a viajar sin su equipaje y decidieron quedarse en tierra.

Confidencial Digital se ha puesto en contacto con Ryanair. Un portavoz oficial asegura que, debido a un problema a la hora de cargar el equipaje, algunas maletas no fueron cargadas este domingo en el vuelo de Budapest a Las Palmas.

Añaden que las maletas han comenzado a ser entregadas directamente a los clientes afectados en Las Palmas y se les ha pedido disculpas por los inconvenientes ocasionados.

Un incidente similar hace una semana

Varios medios húngaros relatan un incidente similar que tuvo lugar hace una semana en el mismo vuelo. Aseguran que el contratiempo se produjo porque el avión iba al límite de combustible y resultaba peligroso viajar con sobrepeso. Un extremo que niega rotundamente la aerolínea.

La compañía responsabilizó del caos al aeropuerto de Budapest porque las cintas de maletas no funcionaban, y por ello no pudo pesarse el equipaje.

Reducción de beneficios de Ryanair

Por otro lado, Ryanair se ha puesto serio en el conflicto que mantiene con sus pilotos y tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) y amenaza con reducir flota y rutas, y proceder a despidos de cara a su campaña de invierno si prosiguen las huelgas. 

La aerolínea irlandesa afirma que, pese a sus concesiones laborales, espera más paros este verano como los que van a tener lugar esta semana en España, Bélgica y Portugal. Los tripulantes de cabina de Ryanair en España están llamados a la huelga los próximos días 25 y 26 de julio en defensa de sus derechos laborales.

Ryanair redujo un 20% el beneficio neto en el primer trimestre de su ejercicio fiscal (de abril a junio de 2018), hasta los 319 millones de euros, según los resultados presentados este lunes por la compañía.

Los ingresos alcanzaron los 2.079 millones de euros en el periodo, un 9% respecto al mismo periodo del año anterior. Su tarifa media se redujo un 4%, hasta los 38,68 euros, con un aumento del 7% de pasajeros transportados, hasta los 37,6 millones.

Michael O'Leary, consejero delegado de la aerolínea, aseguró en el comunicado que acompañaba a las cuentas, que la caída del beneficio se debe a las tarifas más bajas, la ausencia de la mitad de la Semana Santa en el trimestre, los precios del petróleo y costes asociados a los pilotos.

La compañía registró 2.500 cancelaciones de vuelos de marzo a junio, que achaca tanto a la falta de controladores en distintos aeropuertos como a la carencia de personal en Reino Unido, Alemania y Grecia y a las huelgas en Francia.

Además, subrayó el alza del tráfico pese a las cancelaciones de vuelos causadas por la escasez de personal de tripulantes de cabina y el conflicto laboral con este colectivo.

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