Más de 8 millones de albóndigas y 5 millones de perritos calientes. IKEA encuentra en cenas familiares y comidas del sábado una fuente de ingresos extra

Más de 20 millones de visitantes de la popular cadena sueca de decoración y mobiliario han descubierto los menús de IKEA. “Hemos vendido más de ocho millones de albóndigas suecas y al menos cinco millones de perritos calientes” calculan desde la sede española.

Estas ventas le han supuesto al gigante sueco una facturación de 56 millones de euros en la Península Ibérica. En España, con sus 11 establecimientos, se cifra el volumen de negocio en 46,4 millones de euros,  un 10% más de lo que ingresaron sus restaurantes en 2008. Desde que en 1996 la primera tienda IKEA abriera sus puertas en Badalona, todos sus centros cuentan con área de restauración, compuesta de un restaurante, con línea de autoservicio y cafetería; el bistro, tras la línea de cajas de la tienda; y la tienda de comida sueca. A nivel mundial, el área de restauración de IKEA facturó 1.030 millones de euros.

Según ha sabido El Confidencial Digital, en los últimos meses, la compañía ha invertido alrededor de 10 millones de euros en la reforma de las áreas de restauración de algunas de las tiendas en España (L’Hospitalet, Murcia, San Sebastián de los Reyes,…). “El objetivo es ofrecer un mejor servicio a los clientes, ampliando la capacidad del restaurante, renovando su zona de juegos o aumentando el tamaño de la tienda sueca” concretan fuentes oficiales.

Aunque el objetivo de esta área de negocio es “mejorar la experiencia de compra, contribuyendo a que la familia al completo pueda disfrutar de un día entero en nuestras tiendas”, el día que más colas hay para hacerse con una mesa para comer ‘in situ’ es el sábado “especialmente a la hora de la comida”.

“Desde la compañía se pone un especial cuidado en facilitar todos los detalles que pueda necesitar una familia con niños” aseguran directivos de la misma. Conscientes de que el mejor gancho son los más pequeños, existe un menú infantil con plato principal (pasta o albóndigas suecas), bebida y postre (petit suisse, yogurt) por un euro. “Al ser la familia el cliente objetivo más importante, el menú infantil es una de las numerosas ventajas, así como comida para bebés, microondas para biberones/potitos, zona de juegos en el propio restaurante, zona de lactancia, etc.” subrayan los responsables del área de restauración.

El plato preferido por los clientes de IKEA son sin duda las albóndigas suecas, aunque también destaca el plato de salmón marinado. “En los últimos años ha aumentado el número de clientes que desayunan en nuestras tiendas, gracias a propuestas como el desayuno por 1€ (tostada con jamón y café)” recuerdan a ECD desde la sede de IKEA. Otras ‘estrellas’ de los fogones ‘made in Suecia’ son las meriendas familiares a base de tartas tradicionales nórdicas y las tapas suecas de Paco Roncero, que por cincuenta céntimos de euros permiten probar las delicatessen suecas en formato español.

Cabe destacar que varios de sus establecimientos se encuentran en zonas industriales y cercanas a varias universidades, lo que añadido a los horarios de apertura - la zona de restaurante está abierta media hora antes de la apertura al público de las tiendas – contribuye a aumentar el número de comensales.