Podemos lanzará una ofensiva contra el PSOE por la subida de la luz pero los ministros morados guardarán silencio
La vicepresidenta Ribera ha logrado apaciguar a los miembros del Gobierno pero Pablo Echenique y el partido se han reservado los ataques para no dejar espacio a Errejón
La factura de la luz acaba de subir el pasado 1 de junio para un mínimo de 10 millones de consumidores, según los cálculos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), y el Gobierno ha avalado este encarecimiento. Un escenario que incomoda internamente a Podemos, pero que los ministros morados no van a criticar.
La nueva estructura de la tarifa eléctrica afecta a la mayoría de los consumidores y supone un incumplimiento del pacto de Gobierno que alcanzaron PSOE y Unidas Podemos en 2019.
La pretensión de la Vicepresidencia cuarta que dirige Teresa Ribera con este cambio, que supone adaptar la tarificación a las exigencias europeas, es incentivar el ahorro a través de cambios en las pautas de consumo de las familias españolas.
Sin embargo, ante la subida del precio de la luz con la nueva factura, Podemos está manteniendo un complejo equilibrio, tratando de diferenciar su posición en el Gobierno de coalición y la postura del partido.
Es una estrategia marcada por la vicepresidenta tercera, Yolanda Díaz, pero que no está evitando la tensión interna dentro del Consejo de Ministros, pese a que no está trascendiendo.
Que el conflicto no trascienda
La prudencia de Unidas Podemos, ante la primera gran crisis energética que gestiona el Gobierno de coalición después de que Pablo Iglesias dejase la política, obedece a un cálculo.
Según ha podido saber ECD por fuentes del Ejecutivo, tanto del PSOE como de Podemos, Yolanda Díaz ha ordenado evitar la polémica y mantener un perfil bajo.
Hay que evitar los reproches en público
La nueva estrategia encaja con la actitud que la vicepresidenta tercera busca implantar como norma entre los ministros del partido morado: Podemos como partido sigue manteniendo sus ideas, pero las trasladará a través de portavoces con una proyección pública menor. El objetivo que se persigue es “no dejar ese espacio a Íñigo Errejón”.
Según las fuentes consultadas por ECD, Díaz también ha demandado expresamente a la futura líder de Unidas Podemos, Ione Belarra, que evite reproches en público a los socios de Gobierno, a diferencia de lo que ocurrió a principios de año, cuando Iglesias indignó a los ministros socialistas por las críticas a la subida del recibo de la luz en plena borrasca ‘Filomena’.
