Las tasaciones ‘optimistas’ y el retraso de las promotoras llevan a muchos compradores a renunciar a lo que ya han pagado y esperar “a que pase el verano”
Bancos y cajas de ahorros cada vez acumulan más llaves de viviendas en sus cajones. Pertenecen a muchos de sus clientes que prefieren renunciar al inmueble y a lo que ya han pagado de hipoteca porque no pueden hacer frente a los pagos –referenciados a tasaciones demasiado ‘optimistas’- o porque “están hartos de esperar que les den el piso”.
Según ha podido saber El Confidencial Digital, el número de clientes que ‘devuelven las llaves al banco’ es creciente. Estos compradores, que se dan cuenta de que no puedenhacer frente al pago de la hipoteca yprefieren renunciar al piso y perder lo que ya han pagado de la compra, porque “les sale más rentable”.
De acuerdo con fuentes oficiales de varias entidades financieras, hay fundamentalmente dos 'perfiles' para estos casos, en función de “dónde venga el problema”.
Por un lado se trata de gente que ha obtenido una tasación superior al valor real del inmueble, por lo que con el préstamo hipotecario que consigue tiene “dinero para dar la entrada y para solucionar los gastos” derivados de la transacción, que suelen situarse en un 10% del valor real de la compra-venta, explican fuentes financieras a ECD.
Estos clientes son “los primeros que nos ponen las llaves encima de la mesa”, resume el responsable de una sucursal valenciana. Cuando “lo tienen difícil para pagar la hipoteca” les ‘compensa’ renunciar a la vivienda y a las mensualidades que ya hayan pagado ya que “realmente, ellos no pierden dinero”.
Gracias a esas “tasaciones tan optimistas” los compradores cuentan con “un margen de maniobra” ya que cubren los gastos de la adquisición, explican fuentes de uno de los principales bancos nacionales.
Otro de los factores que agrava esta tendencia es el retraso de las promotoras a la hora de entregar los pisos a los compradores.
Una caja andaluza reconoce a este confidencial que está teniendo problemas con varias promociones en Madrid, porque los clientes que compraron sobre plano “no reciben más que largas” de las inmobiliarias “pese a que las viviendas llevan construidas desde hace meses”.
Por este motivo, los nuevos propietarios “por desesperación” están renunciando a sus hipotecas, al piso y a los pagos que ya han hecho para esperar “a ver si después de verano bajan los precios” y pueden acceder a otra vivienda “aunque sea más pequeña”.
