Los vuelos desde España a Reino Unido se disparan de los 50 a los 800 euros tras la muerte de Isabel II
Las aerolíneas han registrado un aumento de la demanda de españoles interesados en asistir a los actos de despedida en Londres
El precio de los vuelos a Reino Unido desde España se ha disparado tras conocerse la muerte de Isabel II. Las aerolíneas han registrado un aumento de la demanda de curiosos y medios de comunicación interesados en asistir a los homenajes que se van a desarrollar, sobre todo en Londres, durante casi una semana.
Colas de más de dos horas y vuelos con retraso. Esta ha sido la situación que han sufrido miles de viajeros que han aterrizado en los últimos días en los aeropuertos de la capital británica tras anunciarse la muerte de la Reina Isabel II, según público OK Diario. Una noticia que ha colapsado la ciudad.
Se disparan los precios
Un fuerte incremento de la demanda que, según ha podido comprobar Confidencial Digital, ha disparado el precio de los vuelos, con origen Madrid y destino Londres, de los 50 a los 800 euros en apenas cinco días.
Reino Unido se encuentra consternado y la capital británica se ha blindado. Ha aplicado importantes controles de seguridad ante la llegada masiva de curiosos y medios de comunicación que quieren vivir en directo este acontecimiento histórico.
Además de tener que esperar cerca de dos horas en el control de pasaportes, los pasajeros también han sufrido la cancelación de vuelos desde España hacia Reino Unido, así como descontrol en la zona de recogida de equipajes, donde las maletas no cabían en las cintas.
Se dispara el turismo fúnebre
El peregrinaje de las personas que dejan ramos y palabras de despedida en el Palacio de Buckingham es interminable. El vecino Green Park se ha convertido en un inmenso manto de flores, en un altar repleto de mensajes de cariño hacia la reina de Inglaterra.
Pero no son sólo muestras de los londinenses afligidos por la muerte de Isabel II. En la capital británica se ha disparado el turismo fúnebre, y decenas de miles de personas que visitan el país cambian sus planes, dado que el Palacio de Buckingham o la Torre de Londres permanecen cerrados.
