Feijóo apostó por los debates cara a cara cuando tuvo dudas sobre su victoria en Galicia
Alberto Núñez Feijóo inició la campaña electoral en Galicia convencido de su triunfo en las urnas, y de que conservaría la presidencia de la Xunta con una holgada mayoría absoluta. Sin embargo, a última hora apareció la posibilidad de perder dos escaños, uno en Pontevedra y otro en alguna de las otras tres provincias, y eso le llevó a aceptar debates cara a cara con sus principales rivales. La decisión no pudo ser más aceptada: “Machacó a Vázquez recordándole su seguidismo a Zapatero, y también a Francisco Jorquera, acusándole de la posición del BNG en el Congreso a favor de todas las medidas del Gobierno del PSOE. Su intervención en esos debates fue determinante para mejorar los resultados de 2009”, dicen en el entorno de Núñez Feijóo.