En el Gregorio Marañón no olvidan a Villarejo
Todavía se acuerda el personal del hospital madrileño Gregorio Marañón del paciente que acudió el pasado 15 de mayo, fuertemente escoltado por la Policía Nacional. Se trataba del comisario Villarejo, encarcelado por presunta pertenencia a organización criminal. Había sufrido una reacción alérgica en la prisión de Estremera y fue trasladado de urgencia al centro hospitalario, donde le practicaron un cateterismo para detectar posibles dolencias cardiacas. Médicos, enfermeros y celadores no olvidan a día de hoy aquella madrugada, en la que, durante el turno de guardia, apareció el preso más famoso de España: “¿Os acordáis de cuando vino Villarejo a Urgencias antes de verano? Qué susto, estaba a punto de morirse”, comentan entre ellos.
