Los independentistas vuelven a votar en las urnas del 1-O
Pese a buscarlas con denuedo durante las semanas previas al 1 de octubre de 2017, la Policía Nacional, la Guardia Civil y el CNI no consiguieron interceptar las urnas que la Generalitat utilizó para el referéndum independentista. Compradas en China e introducidas desde Francia, las urnas se convirtieron después casi en objeto de coleccionista e incluso de compra-venta por parte de los independentistas catalanes más convencidos. En alguna manifestación se ha vuelto a ver alguna de estas urnas, pero el pasado sábado 2 de febrero algunas de las ya icónicas cajas blancas, con el escudo de Cataluña estampado y una tapa negra con ranura, sirvieron de nuevo para una votación. Fue en las “primarias republicanas” que la Assemblea Nacional Catalana (ANC) impulsa ahora para lanzar candidaturas independentistas unitarias en las municipales de mayo. El día 2 los inscritos votaron en las primarias de L’Hospitalet de Llobregat, Terrasa y Sant Just Desvern, y en algún caso pudieron depositar su papeleta no en cajas de cartón, sino en una de las urnas del 1-O, que participantes en el operativo del referéndum ilegal de independencia aún conservan un año y cinco meses después.
