A Chaves le quema en las manos Cajasol y dice que hay que fusionarla cuanto antes con Unicaja
Cajasol, la caja de ahorros andaluza, se ha convertido en un dolor de cabeza para el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves. Sólo con citar tres de los jaleos económicos en que se ha visto metida la entidad, como la venta a los Sanahuja de una parte de Metrovacesa (con posteriores demandas judiciales de por medio), el caso de Caymasa y el ‘affaire’ Soto de Paniagua (también hay demandas), es más que suficiente.
Cajasol, cuyo nombre institucional es “Monte de Piedad y Caja de Ahorros San Fernando de Huelva, Jerez y Sevilla”, nació de la fusión de las cajas sevillanas El Monte (Caja de Ahorros de Huelva y Sevilla) y Caja San Fernando (a su vez, fusión de Caja de Ahorros de Sevilla y Caja de Ahorros de Jerez).
Los problemas vienen sobre todo de la agresiva línea de negocio que adoptó El Monte desde la Expo de Sevilla en 1992 y de la red de empresas participadas que creó, de forma que pasó de ser una simple caja local a cabecera de un nutrida cartera industrial, con el ladrillo como principal ingrediente e incluyendo el increíble ascenso de Luis Portillo.
Le cuentan a El Chivato que el presidente andaluz no sabe qué hacer y que Cajasol le quema en las manos. Dice que “hay que fusionarla cuanto antes” con Unicaja porque está desangrándose. Y se afirma que el secretario general de UGT, Cándido Méndez, está de acuerdo pero no a cualquier precio.
