FG logró llevar con el máximo secreto la salida de Goirigolzarri: buena parte de la dirección del BBVA se enteró por la prensa
La llamada ‘prejubilación amistosa’ de José Ignacio Goirigolzarri, número dos del BBVA, pilló por sorpresa a buena parte de propios y ajenos. Le cuentan a El Chivato que, tanto los pesos pesados del sector, como un número significativo de directivos del banco se enteraron “esa misma tarde por las ediciones digitales de los periódicos”. Es más: en no pocos casos, “no se lo creyeron hasta que lo vieron en la prensa el día después”.
En ámbitos bancarios le dicen a El Chivato que, pese a las repetidamente comentadas desavenencias entre Francisco González y Goirigolzarri, “nadie se esperaba una salida así, tan repentina”. FG ha conseguido llevar con el máximo secreto una operación de tan alto calado. Y no es tan fácil
Una vez asimilada la sorpresa, en el sector se da por sentado que lo amistoso de la prejubilación Goiri, que ha dedicado los últimos 30 años a dirigir el BBVA, ha venido precedido por alguna que otra cláusula que asegura que se mantendrá al margen de los ruedos financieros “por lo menos un par de años”.
Y no son pocos los financieros, analistas e inversores que lamentan la salida de una personalidad tan experimentada. No entienden “cómo se puede marchar a alguien así, con su experiencia y profesionalidad, y con tan sólo cincuenta años. En tiempos como los que corren, lo que hacen falta son gestores que sepan de lo que están hablando”.
Sobre Goirigolzarri, quienes han trabajado con él destacan la “absoluta reserva” del hasta ahora consejero delegado de BBVA, que “se prodigaba poco en público, más allá de sus intervenciones en las presentaciones de resultados y otros actos corporativos”.
