Pedro Sánchez no quiere que se hable del “viejo” y el “nuevo PSOE” a propósito del federalismo simétrico
El PSOE presentó el domingo la llamada “Declaración de Zaragoza”, en la que los socialistas exigen al Gobierno de Rajoy que se siente a negociar una reforma de la Constitución basada en la conversión de España en un Estado federal.
El documento, hecho público por la dirección nacional, incluye la defensa del federalismo y de la igualdad entre las autonomías. Sin embargo, el Partido Socialista evitó, de forma consciente, hablar de “simetría” en ese modelo federal, a pesar de que desde Ferraz aseguran que la apuesta de Pedro Sánchez es el federalismo simétrico.
Según le cuentan a El Chivato, en la Declaración de Zaragoza el secretario general no puso apellido a su propuesta de “federalismo” para evitar que desde la prensa, y desde el PP, se hablase del “viejo” y del “nuevo PSOE”.
Dirigentes socialistas recuerdan que Alfredo Pérez Rubalcaba siempre defendió, en su etapa al frente del partido, un “federalismo asimétrico”, que ahora choca frontalmente con el proyecto de Sánchez. Desde Ferraz se temía que esa diferencia creara “un debate absurdo” sobre cuál propuesta del PSOE era mejor.
La ejecutiva federal quiso también evitar que en el propio partido se generara una polémica interna, entre los 'herederos' de Rubalcaba, y la nueva cúpula, que defiende más competencias para todas las regiones y no solo para Cataluña, tal y como propone la presidenta de Andalucía, Susana Díaz.
No obstante, desde Ferraz reconocen que, si el PP o cualquier periodista les pregunta si su modelo de Estado federal es simétrico o asimétrico, no se andarán con rodeos: “Es simétrico. El Gobierno pretende generar esa duda para así no negociar, pero nosotros lo tenemos claro”.
