Rodríguez Ibarra tuvo la oferta de ir como número dos del PSOE en las europeas pero dijo que no por la protesta de su hija
Juan Carlos Rodríguez Ibarra estuvo a punto de convertirse en eurodiputado socialista, volviendo así a la política activa que había abandonado poco antes, aunque en este caso para ir a Bruselas. Al final dijo que no por motivos familiares.
Le cuentan a El Chivato que el ex presidente extremeño recibió el ofrecimiento de figurar en segunda posición en la candidatura del PSOE, detrás de Juan Fernando López Aguilar, propuesta que se le hizo antes de plantear eso mismo a Ramón Jáuregui.
Rodríguez Ibarra estaba dispuesto a aceptar, pero se cruzaron sus circunstancias familiares. Por aquella época coleaba el asunto de su separación matrimonial, y más en concreto escuchó de su hija el ‘reproche’ de que, después de haber dejado la presidencia de la Junta, de nuevo se planteara volver a no estar en casa.
El argumento se centró en que hasta entonces la familia apenas había podido convivir con él, y en que ahora, que tras dimitir podrían pasar tiempo juntos, no les parecía bien que se marchara a Bruselas. El razonamiento le convenció, y por eso Rodríguez Ibarra declinó la oferta.
