Combatir a los narcos en el Estrecho, ahora con una impresora 3D

La persecución de las redes de narcotráfico y contrabando que introducen droga y tabaco ilegal por las costas de la provincia de Cádiz es una de las prioridades de las Fuerzas de Seguridad. La situación en la comarca del Campo de Gibraltar preocupa al Ministerio del Interior, que en los últimos años ha mandado refuerzos humanos y materiales a la zona.

En estas páginas ya se contó hace unas semanas que la Secretaría de Estado de Seguridad tenía en marcha varios procesos de compra de equipos destinados a las unidades contra el narcotráfico de la Guardia Civil: una herramienta hardware/software para acceder a los datos de dispositivos móviles de Apple, un equipo de captación de audio encubierto, un sistema de análisis forense de esos audios...

El Chivato ha podido saber que los guardias civiles implicados en esta misión van a recibir otro ‘arma’ llamativa, aparentemente alejada de la actividad policial de lucha contra la delincuencia organizada. Se trata de una impresora 3D a color, que Interior precisa que deberá tener una velocidad de producción de 1817 cm³/h y una resolución del cabezal de impresión de 1200 ppp. Se requiere que produzca “piezas termoplásticas de ingeniería con propiedades mecánicas óptimas”, funcionales y a todo color.

¿Qué hará la Guardia Civil con esta impresora 3D? La documentación del contrato no lo explica ni ofrece detalle alguno, quizás para no dar pistas a los narcos sobre esta nueva herramienta. Sí explica el ministerio que las unidades de la Guardia Civil han adquirido una experiencia positiva con el uso de sistemas de impresión 3D, y ahora necesitan adquirir una impresora propia “que permita la creación de piezas u objetos, necesarios para Unidades de la Guardia Civil implicadas en la lucha contra la delincuencia organizada nacional e internacional, en el Estrecho de Gibraltar y zona de influencia”.

Destaca además que con ese equipo “se realizaría la fabricación de las distintas piezas funcionales a todo color, obteniendo un gran nivel de detalle y precisión dimensional para pequeñas piezas y será compatible con su utilización con futuros materiales”.

Además, al tener una impresora propia y no tener que encargar piezas a una empresa externa, se gana también en confidencialidad: “Con la impresora 3D, gestionada en el seno de las Unidades de Investigación, se asegura la debida reserva y sigilo, con respecto al diseño y fabricación de componentes destinados a misiones de investigación de la delincuencia organizada nacional e internacional”.

El Ministerio del Interior mantiene un Centro de Concentración Contra el Narcotráfico (CCON Sur), “el cerebro de las operaciones contra las redes del tráfico de hachís en las costas andaluzas y cuyo eje pivota desde hace décadas en el Campo Gibraltar”.

En ese centro trabajan, bajo la instrucción de jueces y fiscales, especialistas en narcotráfico, blanqueo de capitales, crimen organizado y corrupción de cuatro unidades de la Guardia Civil: Policía Judicial, Grupo de Acción Rápida (GAR), Asuntos Internos y Servicio de Información.

Además de en ese centro, los guardias civiles también operan “a pie de terreno”, dirigidos por el Organismo de Coordinación del Narcotráfico (OCON Sur), compuesto por un centenar de miembros de las citadas unidades de la Guardia Civil.