Por qué el PP no ha hecho sangre con Rodrigo Rato

Los instrucciones se han cumplido: nadie en el Partido Popular -ni cargos intermedios ni diputados- ha cargado en público contra Rodrigo Rato. Solo el ‘verso suelto’ de Esperanza Aguirre se saltó el guión, aunque más que atacar al ex vicepresidente asumió que su detención podía perjudicar al partido: “Puede ser devastador electoralmente”.

Y es que, según le cuentan a El Chivato, en La Moncloa cundió, a finales de la semana pasada, el pánico por las reacciones que los populares podían tener ante la informaciones sobre el que fue número dos de José María Aznar en el Gobierno. Y, para evitar males mayores, se lanzó un mensaje claro a Génova a y a las cúpulas del PP en Congreso y Senado: “No hay que hacer sangre contra Rodrigo Rato”.

Cargos del partido explican que ya el viernes de la semana pasada estaba aprobado el argumentario para justificar la oposición del partido a que se cree una comisión de investigación en el Congreso, tal y como iba a reclamar el PSOE. También estaban listos los parlamentarios para las preguntas de los periodistas sobre el caso Rato.

Desde Moncloa las indicaciones fueron precisas: “Recordar que hay una investigación abierta y que por tanto poco más hay que decir”. No obstante, en el Gobierno se recomendaba apostillar que “en esta legislatura hemos luchado por una justicia independiente, y estos casos demuestran que lo hemos conseguido”.

Así las cosas, ningún diputado dio el miércoles ni un solo titular a los informadores en el Congreso. Todos y cada uno de los entrevistados respondieron con el mismo mensaje a los periodistas. También los ministros, que optaron, o por el silencio, o por responder con los mismos diseñados por Moncloa.

Solo Cristóbal Montoro, que escuchó peticiones de dimisión por parte de la oposición por la amnistía fiscal, accedió a charlar con los periodistas... pero sin las cámaras grabando. En ese corrillo, el ministro de Hacienda sí reconoció que él personalmente, y otros miembros del Gobierno, estaban molestos con la actitud de Rato.