Los policías multiplican los grupos de WhatsApp para compartir avisos sobre amenazas islamistas
Tal y como adelantó este martes El Confidencial Digital, los agentes del Cuerpo Nacional de Policía están en alerta a cuenta de la amenaza yihadista. Los propios policías se están avisando unos a otros del riesgo de sufrir un secuestro para luego ser grabados mientras son ejecutados por los terroristas.
Pues bien, según le cuentan a El Chivato, a este intercambio de mensajes alarmistas ha contribuido, de forma decisiva, la multiplicación de los grupos de WhatsApp creados y compartidos por policías nacionales.
Antes de los atentados de Francia y antes de que el ministerio del Interior elevara la alerta antiterrorista a nivel 3, los policías ya utilizaban esta aplicación. Interactuaban con sus compañeros, sobre todo los más cercanos, y comentaban lo que pasaba en sus comisarías. Sin embargo, en las últimas dos semanas,los mensajes y el número de integrantes de los grupos han crecido de forma espectacular.
Ahora, “todos tienen algo que decir relacionado con los islamistas”, explican algunos afectados. Por ejemplo, se ofrecen pistas sobre todo lo que pueda suponer un riesgo: desde la presencia de árabes en las cercanías de una comisaría, hasta posibles vulnerabilidades en la seguriLos policías multiplican los grupos de WhatsApp para compartir avisos sobre amenazas islamistas
dad de los controles policiales en carretera.
En uno de estos grupos, se dio la voz de alarma recientemente por la existencia de la aplicación SocialDrive, que puede servir a los islamistas para saber en qué punto exacto de España se ha desplegado un dispositivo de la Policía Nacional.
También hay agentes que “meten a compañeros procedentes de brigadas de información, para que compartan con el resto lo que saben acerca del terrorismo yihadista en España”. No obstante, añaden, “ellos son los que menos novedades pueden aportar por su obligación de ser discretos”.
Desde el Cuerpo aseguran que estos grupos de WhatsApp son de gran utilidad: “nos dan pistas, aunque todo hay que cogerlo con pinzas”. Desde el ministerio del Interior conocen este intercambio entre los agentes pero les recomiendan “no sacar las cosas de quicio”.
