El tiastro de la reina Letizia retoma el mando de la Policía en Cataluña
El coronavirus ha causado varias bajas mortales en las Fuerzas de Seguridad (Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d’Esquadra, Ertzaintza, policías locales). Pero también afectó a los máximos responsables operativos, los directores adjuntos operativos (DAO) de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, que tuvieron que abandonar las comparecencias en La Moncloa por este motivo.
Otro que cayó enfermo fue el jefe superior de Policía de Cataluña, el comisario principal José Antonio Togores. El 19 de marzo se confirmó que Togores había dado positivo al hacerse la prueba tras varios días con síntomas de ser portador del Covid-19.
Este comisario de la Policía Nacional no es sólo conocido por ser el jefe superior en Cataluña, cargo que ocupa desde septiembre de 2018, sino también por un lejano parentesco con la reina Letizia. Es hermano de Ana Togores, la segunda mujer de Jesús Ortiz, el padre de doña Letizia. El comisario, por tanto, es tiastro de la reina.
Pues bien. Han pasado más de dos meses desde que diera positivo y El Chivato ha podido saber que Togores ya se ha reincorporado a su puesto de trabajo.
Fuentes policiales aseguran que, desde hace unos veinte días, ha vuelto a prestar servicio en la Jefatura Superior de Policía de Cataluña, en Barcelona.
Al principio, cuando dio positivo por coronavirus, desde la Jefatura Superior indicaron que como apenas había desarrollado síntomas leves, Togores estaba “teletrabajando”: se le había instalado un sistema en casa para poder mantenerse en contacto con sus subordinados a través de videoconferencias.
Una vez recuperado, Togores se ha reincorporado a sus tareas habituales ya de forma presencial. Por ejemplo, dirigió una reunión informativa para analizar las propuestas que desde la Jefatura Superior de Policía de Cataluña harán a la Dirección General sobre condecoraciones con cruces al mérito policial.
Este año se espera que pueda haber un número alto de propuestas para medalla, ya que se premiarán actuaciones realizadas a lo largo de 2019, cuando la Policía Nacional tuvo que hacer frente en Cataluña a disturbios graves provocados por radicales independentistas y antisistema tras la sentencia condenatoria del Tribunal Supremo a los responsables de la intentona secesionista de otoño de 2017.
