5 trucos para decorar con muebles nórdicos

Cada vez son más las personas que optan por una decoración nórdica con líneas minimalistas, estancias luminosas y colores claros. Se trata de un estilo que rompe con decoraciones recargadas y voluminosas. La clave para poder adaptar esta línea a nuestros hogares reside en la capacidad de combinar los muebles nórdicos con otros elementos del entorno para crear un ambiente único.

Procura no recargar los muebles

La decoración nórdica se caracteriza por la sencillez. Es por ello por lo que no se debe sobrecargar el ambiente con excesivas figuras decorativas u otros objetos sobre los propios muebles escandinavos. Lo ideal es hacerse con los muebles con el volumen adecuado para poder guardar dentro de ellos todo lo que necesitemos y que así no nos veamos en la obligación de tenerlo a las vistas.

Combina distintos materiales

Otra de las grandes posibilidades que ofrece la decoración nórdica es la combinación de distintos materiales, colores, texturas... Prueba a juntar distintos elementos y lograrás un estilo único y original. Aunque se recomienda el uso de textiles de origen natural, como el lino, el algodón o la lana, no existe una única fórmula para decorar nuestras habitaciones. La decoración final dependerá también del modo de vida de las personas de la casa.

Si por algo se caracteriza este estilo es por la comodidad que proporciona. Dicho confort también se manifiesta en la decoración. Los muebles nórdicos combinarán a la perfección con una alfombra que nos guste en particular, por ejemplo. La clave está en hacer nuestro el espacio y ser capaces de disfrutar de él.

Potencia la luz

Uno de los principales distintivos de este tipo de decoración es la abundante iluminación. Aunque es deseable que esta sea natural, es decir, que entre en la estancia a través de puertas y ventanas, es también recomendable complementarla con luz artificial cuando la primera no sea suficiente. La luz del estilo nórdico suele ser blanca, al igual que la luz natural, es por ello por lo que es recomendable hacerse con un par de bombillas de este tipo. A la hora de situar los muebles, es importante no obstaculizar la entrada de la luz con ellos.

Incluye un toque rústico

La estética nórdica suele ir acorde con la artesanía. Es por ello por lo que es recomendable incluir algún elemento de aspecto más rústico o artesanal. Esta puede ser una buena ocasión para elaborar algún elemento con nuestras propias manos. Combinar manualidades con muebles nórdicos puede ser un gran acierto. Así mismo, los objetos que elaboremos podrán ser muy variados, en este sentido, destacan las mantas de lana.

Abre tu vivienda a las plantas

Incluir vegetación en las estancias de la vivienda es también un truco fundamental si queremos conseguir una decoración nórdica. Esto va más allá de una cuestión estética, sino que también repercute directamente en la forma de entender nuestra casa. Por norma general, en los países nórdicos se aprecia especialmente la naturaleza. Desafortunadamente, al vivir en una ciudad, es difícil estar en permanente contacto con los árboles u otros recursos naturales. Un buen apoyo puede ser el cultivo de plantas de interior. Además de los muchos beneficios que tienen para mantener sano el ambiente, quedarán de maravilla junto con nuestros muebles escandinavos.

 

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