A Iñaki Azkuna, alcalde de Bilbao, que regalará 20.000 ceniceros portátiles para evitar suciedad adicional en la calle

Corre por los mentideros la especie de que los bares, lejos de haber sido perjudicados por la nueva ley antitabaco, han conseguido aumentar su clientela porque ¿quién va a fumar en plena calle durante el frío invierno? Otra de las consecuencias de la nueva ley de la ministra Elena Salgado es que las calles se llenan de colillas, ya que los fumadores las sueltan en la puerta de sus oficinas o cualquier local comercial. En Bilbao parece que se pondrá pronto una solución a este problema. El Ayuntamiento repartirá gratis 20.000 ceniceros portátiles para salir al paso de la nueva necesidad creada con la ley. Seguro que el ejemplo del Consistorio bilbaíno cunde, y que en breve será una moda regalarlos hasta en los cumpleaños. Además, de paso, se crea un nuevo artilugio para llevar en el bolsillo o en el bolso, por si había suficiente con el móvil, las llaves, la cartera, el mp3... Guinda a un regalo cívico y bien pensado.