A los tres guardias civiles que convencieron a un joven para que no se arrojara por un barranco de 80 metros

Ocurrió en Moixent esta misma semana. Tres guardias civiles impidieron que un joven de 29 se arrojara a un barranco desde una altura de unos 80 metros. Entre los agentes y otros cuatro sanitarios consiguieron convencer al vecino que llegó a quedarse colgado con grave riesgo de caerse al vacío. En ocasiones, la labor de las Fuerzas de Seguridad del Estado es dúramente criticada por algunos sectores de la sociedad. Sin embargo, noticias como esta dejan claro que nuestros ‘ángeles de la guarda’ están en las calles de ciudades y pueblos para protegernos y velar por nuestra seguridad. Guinda a la labor, a veces no reconocida, de los guardias civiles. Y, en especial, a los tres que pudieron evitar este suicidio.

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