A Evo Morales y su Gobierno, que ahora dicen que el diputado de su partido que se reunió varias veces con Batasuna no sabía que estaba ilegalizada
O sea que sí. Porque primero fue que no. Que no se habían visto. Ahora, el Gobierno boliviano matiza a las autoridades españolas que el diputado del partido Movimiento al Socialismo (MAS) sí mantuvo diversos encuentros con miembros de Batasuna en verano pasado pero que desconocía que la formación abertzale estaba ilegalizada. Así figura en la nota verbal -a la que tuvo acceso este martes Europa Press- enviada por la legación de Bolivia al Ministerio de Exteriores español para responder a las explicaciones pedidas por el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Bernardino León, al encargado de negocios de la embajada, Alvaro del Pozo, después de que el diario El Correo informara de dichos contactos. El Gobierno boliviano afirma en esa nota (que equivale a una comunicación oficial entre una embajada y el Ministerio de Exteriores) que esos encuentros "constituyen hechos aislados que se habrían realizado", por parte del diputado Feliciano Vegamonte Vergara, "en desconocimiento de las actividades ilegales que organiza la organización de referencia", en alusión a Batasuna. Inaudito. El hombre del jersey de alpaca y su Ejecutivo se reconoce perfectamente competente para someter a las empresas españolas en Bolivia a una presión asfixiante, que roza lo intolerable, pero ahora se hace el despistado cuando juega con fuego. La guindilla parece quedarse corta hoy.
