José Mourinho, entrenador del Chelsea, polémico con la designación arbitral y con un MBA en “guerra sucia”

El director de comunicación de la UEFA, William Gaillard, ha reconocido que el objetivo de los comentarios del técnico del Chelsea, José Mourinho, sobre la designación de Pierluigi Collina como árbitro del Chelsea-Barcelona "es un intento de meternos presión". "Está intentando meternos algo de presión", sentenció sobre las declaraciones hechas por Mourinho a un diario portugués la semana pasada. El técnico luso había comentado: "Algo me dice que el árbitro en Londrés será Collina. Es perfecto para el partido". "Desconocíamos que José Mourinho hubiese dicho que habíamos asegurado al Chelsea que Collina sería el árbitro del encuentro", explicó. Sinceramente, no nos gusta que entrenadores ni nadie de los equipos nos digan qué árbitros deberíamos elegir. Esto no es parte del espíritu del juego limpio que nosotros queremos en nuestras competiciones", concluyó Gaillard. Realmente, el señor Mourinho parece haber emprendido un “carrerón” sin precedentes hacia los primeros puestos de la polémica, la descalificación y la “guerra sucia”. Nada parece quedar incólume en su afán de protagonismo y manipulación. Tantos años a la sombra de grandes maestros parece haberle agriado el carácter y las formas. Algún estamento disciplinario debería darle una advertencia y recordarle que estamos ante un deporte que sirve de referente a millones de niños. Guindilla para el señor Mourinho y un poquito de por favor…