Luxemburgo y Florentino Pérez, que rozan el ridículo al condenar al ostracismo a Figo por motivos empresariales

La persona no debe ser tratada como un objeto o como una mercancía. A eso se asemeja el bochornoso caso de Luis Figo en el Real Madrid: excelente jugador hasta anteayer y condenado al ostracismo ahora porque tiene colgado el cartel de “SE VENDE”.

La persona no debe ser tratada como un objeto o como una mercancía. A eso se asemeja el bochornoso caso de Luis Figo en el Real Madrid: excelente jugador hasta anteayer y condenado al ostracismo ahora porque tiene colgado el cartel de “SE VENDE”. Y la situación roza ya lo ridículo. Vanderlei Luxemburgo sorprendió este jueves al mostrar el “once” titular que se enfrentará el sábado al Sevilla, en el que José María Gutiérrez “Guti”, zurdo cerrado, sustituirá al tocado David Beckham en la banda derecha. Figo volverá al banquillo, aunque la opción más lógica era la presencia del portugués por la banda en la que ha jugado hasta hace sólo semanas. Figo debería plantearse entablar una demanda judicial contra los dirigentes del club merengue por “mobbing” o acoso psicológico laboral. Guindilla a estos gestores que sólo razonan en términos mercantiles. Y felicidades a “Guti”.

 

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