Acabaré pasando de la política
Nací en la post guerra. Durante mi infancia y adolescencia me cansé de oír lo malos que habían sido los que perdieron la guerra. Quizá por ello en mis años universitarios me comprometí en la lucha antifranquista y milité en un partido clandestino. Aunque quizá fuera por aquello de "quien de joven no es de izquierdas es que no tiene corazón".
En mi madurez, coincidente con los primeros años de la transición, no sé si porque en aras del consenso dejó de hablarse del conflicto que enfrentó a media España con la otra media, o por aquello que también se dice de que "quien de mayor continúa siendo de izquierdas es que no tiene cabeza", lo bien cierto es que se templaron mis ánimos y desde entonces más bien he sido una persona de centro. Y ahora que comienza el declinar de mi vida no hago más que oír lo malos que fueron los que ganaron la guerra.
Por reacción, ¿tendré que volverme de derechas?, ¿cuándo de verdad superaremos el afán de revanchismo y olvidaremos de una vez la Guerra Civil en aras de una auténtica reconciliación?, ¿tan poca imaginación tiene nuestra clase política que continúa mirando el pasado en vez de preocuparse de los problemas del presente como el paro, la inmigración y el hambre en el mundo?, ¿o de fijar su horizonte en un futuro lleno de retos, como son el cambio climático y la crisis energética?
Me parece que al final acabaré pasando de la política y de los políticos.
