Energúmenos contra Cristina Cifuentes

Me había prometido no escribir acerca de este tema, pero viendo el cariz que toman los acontecimientos, considero una omisión imperdonable no expresar mi repulsa ante la postura vergonzosa e intolerable de cierto sector de la izquierda española, siempre dispuesta al alboroto destructivo.

Las manifestaciones de unos "presuntos" sanitarios y sanitarias frente a la clínica donde se debate entre la vida y la muerte un político del gobierno - en este caso, la señora Cristina Cifuentes - son una muestra de la indignidad que subyace en los energúmenos y energúmenas, que parecen carecer de los más elementales sentimientos humanos... Se hace realidad lo que Thomas Paine decía: "una mala causa será defendida siempre con malos medios y por hombres malos".

Ante este proceder, recordemos que "hay un límite en que la tolerancia deja de ser virtud", en frase de Edmund Burke. Y los partidos -¿políticos? - que sustentan este gropúsculo de manifestantes están tardando demasiado en desmarcarse de una conducta no solo antidemocrática y deplorable, sino inhumana y cruel. Claro, que para algunos, ese es su hábitat natural: La mediocridad es lo excelente para los mediocres...

Sólo pido a Dios no tener que depender de estos feroces "sanitarios" cuando mi vida corra peligro.