Estatutos históricos o historicistas

Estimado Director: La responsable del PP en temas estatutarios, Soraya Sáenz de Santamaría, dice que es "histórica" la referencia a la realidad nacional andaluza en el preámbulo del proyecto de estatuto andaluz, en alusión al manifiesto cordobés de Blas Infante del que la clase política lo considera "fuentes del derecho". No los historiadores, como analistas de cual fue la realidad de entonces en Andalucía y España. Histórica es la actual inyección de términos no jurídicos en normas marco, que complican la justicia y la igualdad, que ya lo dirán los historiadores.   El diseño gráfico de leyes fundamentales desde la infografía y ofimática del consenso y el partidismo electoral, apartan a los ciudadanos de sus legisladores y legales representantes. El estatuto catalán fue votado con una participación ciudadana inferior a la mitad del electorado y apoyado solo por un tercio. La Constitución europea a pesar de ser apoyada por los partidos mayoritarios, tuvo un resultado similar. Nacionalizar el flamenco como andaluz e introducir deberes y derechos no incluidos en la Constitución, aleja al ciudadano de lo que les une territorial y socialmente. Enseñanza pública laica y derecho a morir dignamente fue la prueba para los socialistas que los populares querían el consenso. No del humanismo cristiano que dicen representar los populares.   Histórico consenso que puede confirmar el distanciamiento de los ciudadanos de los políticos, similar al estatuto catalán y el tratado europeo. Desconfianza de los electores a sus representantes que en un mismo partido dicen cosas distintas dependiendo de donde estén. El estatuto andaluz se aprobarán con el consenso de los políticos, preludio de otro fiasco al que los andaluces darán previsiblemente inferior apoyo al estatuto a reformar. Otro histórico fracaso de la democracia.