Precipitación e interés partidista

Soy un jubilado sin estudios universitarios, pero los años y la experiencia creo que me han proporcionado suficiente sentido común como para darme cuenta de que la precipitación del gobierno en modificar el sistema de elección de la cúpula judicial no debe ser por buscar el bien del país. Si así fuera no tendría prisa y procuraría que las cosas se hicieran bien, buscando el consenso y que el procedimiento no ofreciera dudas sobre su legalidad. Si la premura en conseguir esa aprobación le lleva a violentar el reglamento de la Cámara, debe ser porque lo que se busca es el interés del partido. Y ese bien solo puede ser conseguir una mayoría afín al gobierno en los órganos de gobierno de los jueces. Con lo cual el poder legislativo y el judicial estarán dominados por el ejecutivo. Si mis suposiciones son ciertas, ¿se podrá decir que estamos en un Estado de Derecho?

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