Producción de hidrógeno a partir de aceite de girasol

Las pilas o células de hidrógeno son las unidades de energía basadas en este elemento, en el que muchos ven la energía del futuro, especialmente para su uso en automóviles. El hidrógeno no es en realidad una nueva fuente de energía, sino solamente un nuevo método de almacenarla y usarla, que apenas contamina en el mismo momento de su uso, pero que requiere por su parte consumo de energía para la fabricación de las células, la cual podrá tener más o menos problemas para el medio ambiente dependiendo de su origen. La producción de las células de hidrógeno a partir de un producto agrícola podrá tener la característica de ser considerada como teóricamente menos agresiva con el medio ambiente en relación con las producidas consumiendo energía fósil, si se mira la cuestión desde el punto de vista del balance de los gases de efecto invernadero en uno y otro caso. Investigadores británicos han desarrollado un método para la producción de hidrógeno de uso energético a partir de aceite de girasol. El sistema fue presentado en la ultima convención de American Chemical Society celebrada el pasado año. El prototipo de generador desarrollado utiliza aceite de girasol corriente, vapor de agua y dos catalizadores, uno basado en níquel y otro en el carbono. El hidrógeno obtenido es de una gran pureza (90%), produciéndose dióxido de carbono y metano como subproductos. En el nuevo plan de energía aprobado no he visto que se haya incluido este inestimable medio de obtención de energía, la base a utilizar es el aceite de girasol, producto obtenido de una planta, más que ecológica, de cultivo imprescindible en la mayor parte de los secanos españoles.

 

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