Zapatero y los dos suicidas

Señor director: Una vez más me da miedo el presidente Rodríguez Zapatero tras su intervención en la Comisión del 11-M. Supongo que ha dejado contentos a los que se conforman con las interpretaciones ajenas. Pero si ejercitamos la subversiva memoria no convence y hasta me inquieta. Ante los atentados hay que estar con el Gobierno de turno, no echarle la culpa de esos atentados al Gobierno, que hace todo lo que puede por la seguridad ciudadana. Por ejemplo, el Gobierno de Aznar evitó muchas matanzas por la eficacia de su política contra los terroristas. En Estados Unidos o en Australia fue así. Pero en Ruedo Ibérico los ZP, los Llamazares y la José Pérez Carod-Rovira son diferentes: le echaron la culpas de los atentados a Aznar y muchos de sus extremistas seguidores conculcaron las jornadas de reflexión a sabiendas, como observamos muchos ciudadanos. Por ejemplo, ha hablado mucho de libertad de expresión, pero ahí están sus ataques a los que discrepan de Gobierno de ZP y sus paritarios personajes: ataques a los jueces independientes y a los católicos. Igualmente resulta que, según él, sólo había una línea de investigación de la policía, pero según los mandos de la policía que han declarado había más de una línea de investigación. Igualmente ya no recuerda, porque no le interesa, que él mismo difundió llamando a los directores de los medios de comunicación que había dos terroristas suicidas. Igualmente se ha visto el sectarismo de las actuales autoridades socialistas en relación a que no han permitido que manifestantes contra Zapatero estuviesen en las proximidades del Congreso. En cambio si permitieron a otros manifestantes que lo estuvieran el día que declaró Aznar, para que lo insultaran bien de cerca y le llamaran "asesino" y otras lindezas. Me solidarizo una vez más con los jueces y con todos aquellos que son agredidos por Zapatero por defender día a día las instituciones, libertades y derechos humanos en el mundo.