El cava “Millán Astray” y el diputado de Bildu Jon Iñarritu García

Se ha sobresaltado sobremanera el Diputado de Bildu, Don Jon Iñarritu García, ante la publicación en el Diario “La Razón” de un anuncio a doble página el pasado 29 de diciembre sobre el Cava “Millán Astray” que se está comercializando en España, con mucho éxito por cierto.

Dice que pensaba que, de haberse publicado el día anterior, por el 28, que habría sido una inocentada, y que ese anuncio de dicho Cava era un enaltecimiento fascista, además de muy hortera y muy cutre, para acabar añadiendo un “Muera la Inteligencia”.

Se puede observar semejantes afirmaciones en su Tweet que se acompaña, de donde llama la atención que en su dirección le falta esa “ñ” tan española en su apellido, así como que tiene 115.314 “followers” (seguidores), además de que se ha comido ese “García” tan castellano como español de su segundo apellido.

Aún no se ha enterado Jon que eso del “Muera la Inteligencia” no es más que un mito de la propaganda de sus predecesores y que nunca fue dicho por Millán Astray en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca el 12 de octubre de 1936.

En el momento que redacto este escrito, ese comentario de Jon tiene casi 4.000 “me gusta” (corazones) así como más de 2.000 retuiteos, y de un simple vistazo se ve el perfil de sus seguidores; se trata de toda esa gente virtual antiespañola que mayor e impunemente insulta en las redes sociales; gente sin educación, gente que además se arroga valores morales para atacar a quien no piensa como ellos, y que llevados al extremo pueden llegar a intentar boicotear y difamar un producto comercial totalmente legal, incumpliendo así la normativa de protección de la competencia aplicables en España y en Europa.

Al final, acompaña Jon su Tweet con los hashtags de #Francoland y de #MemoriaHistórica, a lo que se olvida de acompañar esta foto maravillosa que acompaño donde los deportistas vascos hacen el paseíllo de honor al General Franco en una visita de este al Frontón de San Sebastián en el año 1964, que se contiene en el libro “Franco, una biografía en imágenes” de reciente publicación y que también está arrasando en ventas, libro que espero que los Reyes Magos le hagan llegar a Jon para que aprenda algo de su pasado como Pueblo inserto en España, y que así seguirá, desde tiempo inmemorial.

El Diputado de Bildu es muy sonriente; la vida le ha tratado bien y debe tener el estómago bien regado de buenas viandas y caldos españoles.

Tiene un claro sobrepeso que le da ese aire de burgués acomodado en la poltrona política y de heroico ejercitador de su mano y sus dedos aporreadores desde sus terminales móviles, de cara a las redes sociales.

Tiene cara de levantarse los días laborables a las doce del medio día y de echarse después de almorzar unas buenas siestas españolas. Normalmente la vida de holgazán pasa factura y hace que parezcan mucho mayores de lo que realmente son.

No está como esos vascos fibrosos de los que levantaban la cesta con energía y orgullo al paso del Jefe del Estado de aquella época, donde además se ve que era la primera Dama sonriente de entonces, Doña Carmen, la que abre el camino antes de Franco, en un gesto que hasta podría ser censurado como un micromachismo anacrónico por las actuales feministas.

De vivir entonces Millán Astray, y de haberles acompañado a aquel evento deportivo, sin duda que habría sido la estrella en aquel evento, aclamado por los cientos de Veteranos Legionarios de origen vasco que, desde hace cien años ya, han servido heroicamente en La Legión Española. De esto no sabe nada el Diputado Jon porque no cuadra en el “guión” de Bildu y en las fuentes originarias del terror en las que abreva.

Jon Iñarritu lleva ya muchos años abrevando también en las cuentas públicas españolas; nació bastante después del Franquismo, pero ello no es óbice para hacerse pasar por un experto en Fascismo y en Franquismo, y para aporrear con su dedo acusador aquello sobre lo que sólo conoce de oídas.

Según Wikipedia, donde lo definen como un político “español” (me parto …), estudió Derecho en la Universidad del País Vasco y después un Máster en la exclusiva Universidad privada francesa de Pierre Mendes.

Es claramente un niño pijo del post-batasunismo, con aureola de una sonrisa de plató de televisión progre.

Pero lo que sí parece de verdad una inocentada para millones de españoles, si no fuera porque es realmente una trágica realidad política de nuestra Nación, es que semejante representante nuestro como es Don Jon haya sido durante cuatro años Senador “español”.

Que semejante representante como Jon haya formado y forme parte de las Comisiones parlamentarias de Interior, Asuntos Iberoamericanos, Exteriores, Deporte, Cultura, Justicia, Unión Europea, y hasta de Seguridad Nacional y Defensa, debería producir escalofríos a cualquier español con sentido de la decencia y de la “auto-supervivencia”.

Y no sólo eso, sino que además ha sido ponente de estudios sobre movimientos migratorios en el marco iberoamericano (quizá se referirá a los “bolivarianos subversivos”, últimamente bastante de capa caída), o incluso, aquí es lo más fuerte de su actividad parlamentaria, ponente de la Ley sobre precursores de explosivos, donde quizá aquí la pseudo extinta ETA tenga de su mano mucho que aportar en la legislación en España dada su experiencia criminal.

Todo ello se puede consultar es su ficha personal en la web oficial del Senado de España

http://www.senado.es/web/composicionorganizacion/senadores/composicionsenado/fichasenador/index.html?id1=17485&legis=12

En cuanto a su actividad parlamentaria, es otro parlamentario al estilo de Don Carles Mulet, un preguntador de estupideces masivas al Gobierno de turno, para atacar y difamar así a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a las Fuerzas Armadas españolas, “friki miembro” del que no podremos nunca saber los gastos asociados que conllevan sus extravagancias ni sus viajecitos, dada la opacidad informativa al respecto del denominado Senado de España.

También es famoso Jon por comentar televisivamente la “pelea” entre diputados de Ciudadanos y de Vox por ocupar escaños visibles tras las últimas elecciones, y de hacerlo con gran mofa y alegría de sus entrevistadores y contertulios en la televisión pública vasca.

De lo que no forma parte Jon, ni Mulet, es de esa Comisión interparlamentaria tan necesaria en la Democracia Española, pero que nunca llega, sobre el Esclarecimiento de los 400 asesinatos de ETA pendientes de aclarar.

De entre ellos el hermano de Maderal Oleaga, el Legionario vasco-español con la última Laureada de San Fernando, o tantas personas vinculadas con La Legión que fueron asesinadas por los predecesores políticos del sonriente Jon, como por ejemplo el asesinato del Comandante Legionario Imaz en Navarra.

400 asesinatos que sus predecesores políticos aún no han informado a España de sus autores y cómplices, algunos de los cuales son los crímenes más horribles de la Humanidad, como por ejemplo, ese en el que los etarras sacaban los ojos con destornilladores a tres gallegos secuestrados en Francia en el año 1973.

Se cree Jon que nos hemos olvidado de ese reguero de sangre que sustenta sus poltronas en el Parlamento español.

Quizá entonces al hortera, cutre y poco inteligente Jon se le quite esa sonrisa de burgués con la tripa llena, si rebajara su dieta física y mental. Hasta Mulet le podría ayudar en este propósito, y quizá aportar algo de verduras para su recuperación.

E incluso ayudarle a respetar al Cava Millán Astray, que por cierto ya está presente en la mesa de miles y miles de españoles en estas entrañables fiestas navideñas, incluidos vascos, que tienen respeto y admiración por ese Héroe de las Guerras de Filipinas y de Africa, en defensa de España y comandando también a heroicos soldados vasco-españoles, como fue el General Millán Astray; y que no sólo no van a dejar de disfrutar y saborear tranquilamente dicho Cava, sino que además incrementarán sus pedidos, tanto ellos como por medio de su difusión entre sus amigos y contactos, para así empaparse más de esa Gloria y ese Espíritu del Fundador de La Legión Española que tanto indigna al “ejemplar y heroico” Jon y a sus “followers”.

Guillermo Rocafort

Veterano Legionario. Escritor