David Jiménez fue despedido de El Mundo tras proponer la salida de dieciocho cargos del periódico

David Jiménez fue despedido de El Mundo días antes de que se presentara al equipo directivo de Unidad Editorial su plan de cambios en el periódico, un proyecto que, entre otras cosas, preveía el despedido de dieciocho jefes. La propuesta se filtró y provocó “una rebelión” entre los afectados que empezaron a pedir su cese.

Vea todos los cambios que quería realizar

La próxima semana, el 25 de mayo, se cumple un año de la destitución de David Jiménez como director de El Mundo, apenas un año después de haber sido nombrado para el cargo en sustitución de Casimiro García Abadillo.

En su lugar, la empresa que dirige Antonio Fernández-Galiano nombró al veterano Pedro García Cuartango, ex responsable de Opinión, como director “en funciones”. Se trataba, según explico el presidente, de un nombramiento temporal, pero un año más tarde sigue “en funciones” y  sin haber sido ratificado en el puesto de manera definitiva.

Tras su cese, David Jiménez, demandó a Unidad Editorial, afirman que durante el tiempo que se mantuvo en el puesto se produjo una vulneración de sus derechos fundamentales y de la cláusula de conciencia por parte del presidente de la compañía. Denunció haber recibido presiones por parte de Fernández-Galiano. Ocho meses más tarde, ambas partes llegaron a un acuerdo y no llegó a celebrarse juicio.

¿Qué motivó el cese de David Jiménez?

Fuentes próximas a Unidad Editorial revelan a Confidencial Digital cuál fue el motivo principal que provocó el cese de David Jiménez: un plan pretendía transformar de manera radical El Mundo.

El director lo presentó, en primer lugar, a altos responsables de Unidad Editorial, que dieron su visto bueno, a pesar de los cual el documento se filtró y las personas afectadas “se rebelaron para impedir la continuidad de Jiménez y, por consiguiente, la ejecución del proyecto”.  

Antonio Fernández-Galiano viajó a Italia para reunirse con responsables de RCS MediaGroup, empresa matriz de Unidad Editorial, en aquel momento dirigida por Laura Cioli (ahora por Urbano Cairo, el nuevo propietario).

El presidente del grupo español expuso el rechazo que había provocado el plan del director por parte de los afectados y la “rebelión que entonces se estaba viviendo en la editora de El Mundo”. Esta es la razón, según las fuentes consultadas, que condujo al despido de David Jiménez tras un año en el cargo. 

Se iba a despedir a dieciocho jefes

El plan de reformas presentado por David Jiménez, que se puede leer más aquí, ha permanecido en los cajones de la empresa hasta ahora. ECD ha tenido acceso al documento en su integridad. El programa incluía tres aspectos fundamentales: drástica reducción del número de jefes, reorganización completa de la redacción, apuesta por lo digital.

La parte más polémica del plan era precisamente la reducción de jefes, coincidiendo con el tercer ERE del diario. El ex director pretendía el despido de al menos cuatro directivos del staff y otros dieciocho cargos del periódico, evitando así echar a redactores, reporteros y perfiles digitales. También, el número de jefaturas de El Mundo iba a ser reducida de las siete actuales a tres: director, subdirector y redactor jefe.

Vicente Ruíz, Pablo Gil y Pablo Jáuregui con nuevas responsabilidades

La supresión de jefes estaría acompañada de la promoción de una generación de periodistas, que ocuparían cargos de responsabilidades en sustitución de las salidas propuestas.

En los planes aparecen los nombres de Vicente Ruíz que iba a ser nombrado máximo responsable de la web; Pablo Gil, jefe de Madrid; y Pablo Jáuregui, redactor jefe de Ciencia.

Se encargó a un despacho de arquitectos un rediseño de la redacción   

Las fuentes consultadas por ECD cuentan que el ex director de El Mundo encargó a un despacho de arquitectos un rediseño de la redacción: se suprimían los despachos y se procedía a una reubicación de los departamentos. La tendencia a seguir era crear una redacción multimedia y la formación de un equipo específico para la versión en papel.

La redacción multimedia estaría organizada según tres velocidades de trabajo. Un primer grupo dedicado exclusivamente al “breaking news”, que trabajaría estrechamente con el departamento de redes sociales y vídeos. Otro encargado de tratar con más profundidad los temas de actualidad del día, área que estaría reforzada con el equipo de vídeos, datos, infografías… etc. Y una tercera última velocidad: un equipo de investigación trabajando sin prisas en las exclusivas.

Otras de las novedades del proyecto era la creación de un departamento encargado de controlar la calidad de los textos, además del relanzamiento de la web de América, con la apertura de una redacción en Bogotá.