La deuda y la piratería ‘atenazan’ al grupo Prisa. Manuel Polanco echa el cierre a la emblemática red de librerías Crisol
El Grupo Santillana, propietario de la cadena de tiendas Crisol, ha decidido cesar la actividad de la misma para centrarse en su principal negocio editorial. En un comunicado explican que su propósito es ahora mejorar sus márgenes operativos y, por tanto, sus resultados económicos.
Las causas del cierre, explican desde Prisa han sido “la desaceleración económica actual, la reorientación, o casi desaparición, de los negocios de música y vídeo, como se entendían en el pasado reciente, así como la permanente caída del consumo en estos últimos meses”. Esta situación, añaden, “no permite proseguir en el esfuerzo de aportar recursos adicionales a los ya realizados en el pasado, para una actividad que no presenta el razonable nivel de viabilidad para el Grupo Santillana, que se encuentra en pleno desarrollo empresarial de nuevos productos y nuevos mercados”.
La cadena Crisol empezó a funcionar como marca en el año 1987, con el objetivo de desarrollar, de forma pionera en España, un negocio de venta de libros y otros artículos de ocio cultural. A lo largo de estos años, “ha conocido diversas etapas de cambio y evolución, hasta alcanzar en la actualidad una dimensión reducida que no presenta posibilidades viables de crecimiento, según el grupo Prisa.
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