La prensa regional sufre la “guerra de los gratuitos”: La Estafeta de Navarra y El Correo de Málaga echan el cierre

La prensa no de pago sigue implantándose en las principales provincias españolas. La publicidad parece ver con muy buenos ojos este nuevo segmento y parece estar provocando algunos “efectos secundarios”. Entre los primeros afectados, la modesta prensa regional. Esta semana han echado el cierre un diario de Pamplona y otro de Málaga, tras la irrupción de prensa gratuita.

La Estafeta de Navarra ha sido una aventura de tan sólo un año de duración. El constructor burgalés Miguel Méndez Pozo lo puso en marcha en 2004, sumando una cabecera más a sus otros dos medios de referencia: el Diario de Burgos y Diario Palentino. Méndez Pozo es además propietario de una cadena de televisiones locales.

El cierre de La Estafeta ha venido precedido del cambio de su director. Como ya revelara en exclusiva meses atrás El Confidencial Digital, su director, el periodista Antonio José Mencía, abandonó el diario pamplonés en abril para hacerse cargo de la dirección de Diario de Burgos.

La maniobra que habría supuesto la “sentencia de muerte” para La Estafeta ha sido la salida al mercado de Vivir Pamplona, un diario gratuito propiedad de La Información S.A. el grupo editor del principal periódico local: el Diario de Navarra. Tras una inversión que supera el millón de euros, Vivir Pamplona tira en estos momentos 22.000 ejemplares y parece haberse llevado el trozo de “tarta publicitaria” destinada a La Estafeta.

Otra cabecera que ha tenido que echar el cierre como el periódico navarro es El Correo de Málaga. La edición malagueña de El Correo de Andalucía ha tenido también una efímera existencia: 18 meses. Editado por la sociedad del Grupo Prisa para prensa regional y local, Grupo de Medios Impresos, no había logrado hacerse un hueco entre sus competidores.

También los gratuitos parecen haber apuntillado al diario de Prisa. Hace año y medio, el Grupo Vocento lanzó en Málaga el diario no de pago “Qué pasa”, en una operación que llamó la atención en su día por su celeridad: diez tardó la compañía en ponerlo en la calle. Salió con una tirada inicial de 30.000 ejemplares que se reparten a primera hora de la mañana en las líneas de la Empresa Malagueña de transportes, trenes de cercanías y áreas de influencia de la ciudad.