Los periodistas hacen autocrítica y destacan la escasa preparación de los profesionales de algunos programas de televisión en la cobertura del accidente del Spanair

Muchos de los periodistas responsables de la cobertura informativa del accidente del Spanair se han reunido este lunes para hacer autocrítica sobre el tratamiento mediático de la catástrofe. Para la mayoría, los programas de entretenimiento deberían haberse quedado al margen.

Esta mañana se han reunido en la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid un nutrido grupo de periodistas y responsables de distintas instituciones y organismos para valorar la cobertura informativa que se produjo a raíz del accidente de Spanair en Barajas el pasado mes de agosto.

Algunos de los participantes han sido Javier Lascuráin, de la agencia EFE; Josep Vilar, de TVE; Ana Ortas, de Telecinco; Cruz Morcillo, de ABC y Jorge A. Rodríguez, de El País. Como mediadores actuaron Magis Iglesias, presidenta de la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE) y Fernando Gonzalez Urbaneja, presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM).

Otro de los bloques de la jornada giró entorno al análisis del flujo informativo desde las instituciones públicas y servicios de emergencia hacia los medios de comunicación, que contó con representantes del Ministerio de Fomento, Aena, Sepla y Emergencias 112.

En líneas generales, la información ofrecida desde los medios de comunicación tras la catástrofe del 20 de agosto fue considerada rigurosa y exhaustiva.

Algunos de los temas que se abordaron durante las jornadas fueron:

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-- La falta de preparación de algunos programas de televisión –de corte social o de corazón- por su inexperiencia para cubrir este tipo de informaciones.

-- El generalizado respeto a las familias de las víctimas y a su derecho a la intimidad: no hubo ni una sola imagen de cadáveres, algo que no pasó tras los atentados del 11 de marzo.

-- La búsqueda de un protocolo ético para acontecimientos como el accidente del Spanair.