Pedro Sánchez firma un pacto de no agresión con Susana Díaz
Hablan todas las semanas, no comentarán públicamente sus diferencias, y protagonizarán gestos de cercanía
Pedro Sánchez y Susana Díaz mantienen “diferencias de fondo” que difícilmente se podrán solucionar. Sin embargo, ambos han decidido mantener un “statu-quo” para evitar hacerse daño mutuamente. Ahora, y después de las dos entrevistas críticas de la andaluza contra el secretario general, los dos dirigentes mantendrán un pacto de no agresión que durará hasta las elecciones de mayo.
Según explican a El Confidencial Digital dirigentes nacionales del PSOE, Pedro Sánchez “pidió explicaciones” a Susana Díaz el mismo día que se publicó su entrevista en El País, en la que la presidenta de la Junta habló de que tenía “un proyecto distinto” al del secretario general. Al día siguiente, en Onda Cero, la andaluza matizó esas palabras, aunque no aseguró, de forma explícita, que apoyaba a Sánchez como candidato a La Moncloa.
Desde entonces, explican desde Ferraz, se han multiplicado las comunicaciones entre ambos dirigentes para intentar llegar a un punto de encuentro. El objetivo, explican, es evitar una guerra interna que debilite al partido y, de paso, a ellos mismos. Por ese motivo, han acordado rebajar la tensión hasta, por lo menos, las municipales y autónomicas de 2015.
Hablan cada semana por vía telefónica
Una de las claves de la nueva relación entre Pedro Sánchez y Susana Díaz es el aumento de la comunicación entre ellos. Según explican personas cercanas a ambos dirigentes, después de las entrevistas de la andaluza en El País y Onda Cero las conversaciones telefónicas se han hecho más frecuentes.
En concreto, y según los equipos de Sánchez y Díaz, los dos “hablan por teléfono cada semana o cada 10 días”. Además, las conversaciones entre los secretarios de organización nacional y andaluz, César Luena y Juan Cornejo respectivamente, también se han consolidado en las últimas semanas.
Tal y como se informó en estas páginas, una de las críticas de la presidenta de la Junta al secretario general era su preferencia a hablar con los ex presidentes, Felipe González y Rodríguez Zapatero, a despachar con ella. Ahora, señalan desde Ferraz, “Susana no puede quejarse de falta de comunicación con Madrid”.
No harán públicas sus diferencias
[OBJECT]Los dirigentes del PSOE consultados por ECD explican que, a pesar del interés de Sánchez y Díaz en “hablar más”, las diferencias de criterio existentes entre ambos no han cesado: “No pueden coincidir en todo y es algo que han asumido”. Sin embargo, tanto el secretario general como la presidenta de la Junta han pactado no hacer públicos esos desacuerdos.
De hecho, el objetivo ahora es fomentar una política de gestos que alejen la imagen de un partido dividido. En este sentido, desde el PSOE explican que “todo cambió cuando Sánchez ofreció a Díaz celebrar en Sevilla los 100 días de su secretaría general”.
Ese acto, celebrado hace dos semanas, sirvió para escenificar una armonía entre ambos dirigentes que se prolongará, por lo menos, hasta los comicios de mayo. Tanto Sánchez como Díaz aprovecharon la cita para intercambiarse mensajes de ánimo, aunque el más claro fue el de la andaluza: “¡Pedro! tienes todo, todo, el apoyo de los socialistas andaluces y mi cariño y afecto; juntos, todos juntos, le vamos a dar un vuelco a España”.
Mayor protagonismo para Susana Díaz
Además, otra de las claves del nuevo “statu-quo” entre Pedro Sánchez y Susana Díaz es la promesa del secretario general de dar más protagonismo, dentro del partido, a la andaluza. Las fuentes consultadas explican que “ella pedía que su voz fuese más escuchada, y parece que Ferraz está por la labor”.
La celebración, el pasado domingo, del primer Consejo de Política Federal, fue una muestra de ello: “Susana es la que preside ese órgano interno y llevó la voz cantante”.
Además, la dirigente autonómica tuvo información privilegiada sobre el texto que iba a ser aprobado, y consiguió que Sánchez defendiera, ante todos los barones, la dotación de más competencias a las regiones, una reivindicación que Díaz lleva abanderando desde que se convirtió en presidenta de la Junta.
