Atentado de Azpeitia. ‘Gurbitz’, el sucesor de ‘Txeroki’ en ETA, aplica su nueva táctica del tiro en la nuca y cuenta con al menos una decena de pistoleros identificados por la Guardia Civil

ETA asesinó ayer en Azpeitia (Guipúzcoa) a su víctima número 943. Ignacio Uría Mendizábal, directivo de Altuna y Uría, una de las empresas concesionarias de las obras del tren de alta velocidad al País Vasco, fue tiroteado cuando acudía a un bar que regentaba habitualmente.

Fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por El Confidencial Digital explican que el ‘modus operandi’ practicado en este atentado evidencia claramente la mano de Aitzol Iriondo, alias ‘Gurbitz’ o ‘Barbas’. El sucesor de ‘Txeroki’ al frente de los comandos operativos de la banda ya está haciendo notar su impronta y se cree que la orden de asesinar mediante tiros certeros a bocajarro es suya.

Tal y como adelantó ECD la pasada semana, ‘Gurbitz’ es partidario de asesinatos selectivos, bien a través de potentes coches bomba o, como en el caso de ayer, mediante el siempre eficaz tiro en la nuca –consultar información-.

Su perfil asesino y su elevada posición en el organigrama etarra llevan a los servicios de Información de la Guardia Civil a pensar que ‘Gurbitz’ se ha rodeado de un grupo de pistoleros listos para acatar sus órdenes y con capacidad operativa inmediata.

Se trata de etarras identificados por las Fuerzas de Seguridad y que forman parte del círculo cercano de Iriondo. Todos ellos son jóvenes, veinteañeros y treintañeros, y con agilidad para escapar del lugar del atentado a gran velocidad. Son estos:

-- Eneko Zarrabeitia Salterain, ‘Sorgin’. Se cree que fue uno de los terroristas que participaron junto a ‘Txeroki’ en el asesinato de Capbreton. Nacido en Abadiño (Vizcaya) en junio de 1981, formaba un ‘talde’ (comando) con Saioa Sánchez.

-- Aitzol Etxaburu Artetxe. Nacido en Ondarroa hace 29 años, las Fuerzas de Seguridad creen que su aspecto físico es muy diferente al de las fotos que circulan. El motivo: huyó de España en 2005 por haber comprado el teléfono con el que ETA anunció la colocación de un coche bomba en el polígono de Vicolozano, en Ávila, el 24 de septiembre de ese año. Las cámaras de seguridad del local registraron el rostro de Etxaburu y cuando la Policía acudió a su casa para detenerle, ya se había fugado. También regentaba un bar que había sido sancionado con una multa de 3.280 euros por infracciones leves de sanidad.

-- Asier Borrero Toribio, ‘Arrautza’. Natural de Baracaldo. 23 años.

-- Aitor Rodríguez Artetxe, ‘Baserri’. Vizcaíno de 33 años.

-- Hibai Mateo Esparza (del que llama la atención su juventud, 21 años).

-- Itziar Plaza Fernández. Bilbaína de 26 años.

Por su parte, tanto Eneko Gogeascoechea como Jurdan Martitegui se cree que forman parte del equipo de colaboradores más cercano a ‘Gurbitz’. El primero, encargado del ‘aparato de explosivos’. En el caso de Martitegui su elevada estatura reduce su capacidad de pasar inadvertido.