Diplomáticos españoles denuncian las “fobias personales” de Moratinos en los nombramientos de nuevos embajadores en algunos casos flagrantes
Desde algunos sectores de la diplomacia española se están denunciando los modos empleados por Miguel Ángel Moratinos en los procedimientos de designación de nuevos destinos en las embajadas. Se ponen ejemplos –los casos de Manuel de la Cámara, Félix Valdés o Ana Menéndez- y se habla de “fobias personales”.
Según ha podido escuchar El Confidencial Digital en ámbitos diplomáticos, el ministro de Asuntos Exteriores estaría manejando sus propias “listas negras” a la hora de decidir destinos. En ese elenco estarían incluidos algunos funcionarios de la Carrera Diplomática a los que Moratinos considera como “cercanos al PP”. Uno de los casos sería el de Manuel de la Cámara. Este diplomático era, hasta ahora, subdirector general para América del Norte y secretario general del Consejo España-Estados Unidos. Durante el Gobierno del Partido Popular había ocupado el cargo de director general para Europa y Norteamérica y embajador en Turquía. Según las fuentes señaladas, Moratinos le vetó como “número dos” de la embajada de España en Washington y ha optado por dejar vacante ese puesto. Manuel de la Cámara ha sido enviado de “número dos” a Moscú. Hay quien afirma que De la Cámara aspiraba a cubrir en la embajada en Estados Unidos el hueco dejado por Félix Valdés. Según le cuentan a ECD, Moratinos habría “castigado” a Valdés nombrándole cónsul en Manchester, un puesto sensiblemente inferior al que disfrutaba anteriormente en Washington. Otro caso que señalan es el de Ana Menéndez. La diplomática española ejercía como “número dos” de la embajada de España ante la ONU con el Gobierno de José María Aznar. Ana Menéndez solicitó nuevo destino en la embajada española en Jordania pero su solicitud ha sido rechazada. Se da la circunstancia, explican estas fuentes, de que es la única mujer del Cuerpo Diplomático de nuestro país que conoce la lengua árabe. El Confidencial Digital se ha puesto en contacto con la Asociación de Diplomáticos Españoles –ADE-, a la que están adscritos 711 de los más de 840 diplomáticos que hay en activo en la actualidad. Según el presidente de la ADE, el propio Manuel de la Cámara, no es verdad que existan “listas negras” y afirma que en el concurso de este año el 90% de los diplomáticos han sido designados para el puesto que habían solicitado. Sobre su caso en particular declara que él también había solicitado Moscú y que está muy satisfecho con su nuevo nombramiento.
