Los llaman ‘aguadores’. ETA dispone de una red de auxiliares no fichados que transportan armas y explosivos y dan refugio a los pistoleros

Son los ‘aguadores’. Hacen vida normal. Trabajan en una fábrica, en una oficina o en una tienda. Pero, a la vez, trabajan para ETA. La banda terrorista, en su afán por evitar más detenciones de sus pistoleros, ha optado por las colaboraciones de personas no fichadas que realizan diversas labores de apoyo a los ‘comandos’.

Fuentes de la lucha antiterrorista precisan a El Confidencial Digital que los ‘aguadores’ están un escalón por debajo de los ‘legales’, los etarras no fichados por la Policía pero que trabajan a tiempo parcial para la banda y cuya labor es de un mayor compromiso con la causa terrorista.

Estos auxiliares, en cambio, no llegan a ser pistoleros: no han recibido ningún tipo de entrenamiento asesino, ni en el manejo de armas ni en la confección de bombas-lapa o coches bomba. Pero su labor es tan importante como la del propio terrorista que coloca el artefacto explosivo debajo de un coche, por ejemplo.

Los expertos asocian a los ‘aguadores’ al ‘aparato logístico’ de ETA: su principal misión es la del transporte de explosivos o armas. Aunque también pueden dedicarse a conseguir información o, incluso, pueden dar cobijo a los etarras de un ‘comando’.

Los ‘aguadores’ de ETA serían, por ejemplo, los últimos terroristas interceptados en Zamora que se dirigían a Portugal con una furgoneta cargada de explosivos y diverso material. Según las investigaciones, eran la avanzadilla de un ‘comando’. También formarían parte de esta categoría quienes esconden a la etarra Maite Aranalde, cuya pista se perdió tras abandonar la cárcel por un error.

Este grupo de terroristas, que colaboran de manera importante con ETA para la comisión de sus acciones criminales, demuestra que la banda está especialmente preocupada por la seguridad de sus pistoleros. Las sucesivas detenciones de dirigentes han puesto en duda los métodos de seguridad de la organización.

Se concluye que en ETA prima desde hace tiempo garantizar la clandestinidad de sus miembros, algo que ha sido descuidado en la última etapa por la falta de preparación de los nuevos etarras. Quieren evitar las filtraciones policiales y los ‘chivatazos’.

 

Video del día

Salvador Illa y Victor Francos admiten que se reunieron
con Koldo García en el Ministerio de Sanidad
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato