Mensaje a Artur Mas: “Por ahí, no”. Fomento del Trabajo prepara un gran acto que convertirá en un aldabonazo del empresariado catalán contra el independentismo

El evento iba a celebrarse en 2012, pero los actos de la Diada y las posteriores elecciones autonómicas alteraron el calendario. Según ha sabido El Confidencial Digital, la voluntad de Fomento del Trabajo es lanzar al presidente catalán este mensaje: “Señor Mas, por ahí no. La secesión no es el camino”. Los empresarios exigirán la vuelta al diálogo Madrid-Barcelona y un pacto fiscal.

La patronal catalana está buscando local para el acto y trabaja ya en la preparación del evento.

Apoyo cero

Los principales líderes empresariales catalanes, con nombres muy conocidos, han movilizado al resto de empresarios contra la deriva independentista. Además de Fomento del Trabajo, todas las grandes sectoriales catalanas (alimentación, bodegueros del cava, química, farmacéuticas, textil, siderurgia y metal) están posicionadas contra el secesionismo.

Según las fuentes consultadas, el núcleo duro del empresariado catalán ya se lo ha dicho directamente a Artur Mas: “Apoyo cero a tu proyecto. O congelas el proyecto secesionista y negocias con Madrid un pacto fiscal, o hacemos público que no te apoyamos”.

El más rotundo sigue siendo Lara, dueño del Grupo Planeta, que ha invitado a Mas a desandar el camino y a soltarse del brazo de Esquerra Republicana cuanto antes.

‘Cerco de hielo’

Los líderes empresariales catalanes han tejido un ‘cerco de hielo’ alrededor de Artur Mas y su proyecto independentista, según medios cercanos a estos. La estrategia es que las patronales y sectoriales se posicionen frente al proyecto independentista y se lo hagan saber a Mas.

Hasta ahora, sólo Fomento del Trabajo se ha pronunciado públicamente en contra del programa independentista y el anuncio de un referéndum ilegal.

La presión de los grandes empresarios sobre Gay de Montellá, presidente de Fomento, le empujó a dar el paso, pese a las muchas dudas y el temor a la reacción violenta de la Generalitat. Esa presión se ha desplazado a las sectoriales catalanas, todas en la misma onda que Fomento.

La Generalitat solo cuenta con el apoyo de las patronales comarcales, y de pymes que subvenciona generosamente y donde ha colocado gente de CiU.

Mas ha bajado el radicalismo

Si se hace público que los grandes empresarios de alimentación, los bodegueros, los empresarios farmacéuticos, las multinacionales químicas, la siderurgia, el textil, o sea la crema del empresariado catalán, no sólo no lo apoyan, sino que están en contra del proyecto independentista, el coste político para Artur Mas sería muy serio. Poco menos que un torpedo en la línea de flotación de la Generalitat.

Los empresarios han percibido que Mas ha rebajado mucho el nivel de radicalismo de su discurso inicial y ha dejado de utilizar expresiones sistemáticas de confrontación política con Madrid, pero no se fían de esa finta política; eso no suficiente para ellos.

El ‘pinyol’

Los patronos confían en que los próximos meses los acontecimientos, y sobre todo la crisis de CiU, lleven al presidente de la Generalitat a rebobinar y buscar una salida a la difícil coyuntura en que ha metido a Cataluña y España.

Una de las cosas que más les preocupa es la presión que ejerce el pequeño grupo del “pinyol”, los Oriol Pujol, Francesc Homs y compañía, que tienen cercado literalmente a Mas y no terminan de ceder: siguen embarcados en el discurso independentista acérrimo y radical.

“Desactivar a Homs, Pujol, Puig y compañía, no es nada sencillo. Tienen cogido a Mas por el cuello y no es fácil que lo suelten. Le empujaron a la deriva independentista y no van a recular a corto plazo, pero hay formas de hacerlos entrar en razón”, resume para ECD una fuente cercana a la cúpula del empresariado.