Consigna de Javier Fernández

El PSOE convertirá 2017 en el año del acoso y derribo al PP

El partido se ha fijado como objetivo recuperar su papel de antagonista frente a los ‘populares’. Preocupa que no se consigue frenar la caída de las encuestas

Rajoy y Javier Fernández, presidente de la gestora del PSOE.
Rajoy y Javier Fernández, presidente de la gestora del PSOE.

El PSOE se ha propuesto recuperar durante este 2017 la imagen de partido frontalmente opuesto al PP. La consigna de Javier Fernández, que cuenta con el apoyo de otros dirigentes del partido, es que los socialistas escenifiquen en el Congreso un PSOE “combativo”. Quieren reparar el daño que causó en parte de la militancia la abstención a la investidura de Rajoy.

Las posibilidades de que el PSOE apoye los presupuestos que presentará el PP en primavera son “muy remotas”. Así lo calificaba esta semana el presidente de la gestora socialista, Javier Fernández, al ser preguntado por las negociaciones.

Según ha sabido El Confidencial Digital de fuentes socialistas próximas a la dirección actual de Ferraz, esas palabras esconden las líneas maestras de la que será la política del PSOE durante este 2017: una oposición frontal al Partido Popular y a sus medidas más polémicas y mediáticas. Y hacerlo más visible aún de lo que lo hace Podemos.

En esta estrategia tiene mucho que ver Javier Fernández. El asturiano ha trasmitido esta “consigna” –que no orden- al resto de cuadros de mando de Ferraz. Según indicó, este nuevo posicionamiento es básico y necesario para recuperar el crédito entre los sectores críticos de la militancia.

De frente contra el PP

Lo que se prepara en Ferraz, básicamente, es copar “titulares con nuestra oposición al PP”. De manera sistemática y generalizada, el PP “debe toparse de frente con los socialistas en casi todo lo que proponga”. Eso es lo que propone Javier Fernández.

Además, en Ferraz consideran clave manejar como primera fuerza de la oposición el proceso para la eliminación o ‘dulcificación’ de algunas de las medidas más polémicas del PP en la última legislatura. Por ejemplo, la reforma laboral o la Ley Mordaza, proyectos que los ‘populares’ ya han admitido que están dispuestos a negociar.

Por otra parte, como se contó en ECD, el PSOE también tiene previsto poner sobre la mesa leyes y medidas aprobadas en las legislaturas de Rodríguez Zapatero y aparcadas tras la llegada de Rajoy a La Moncloa. Una de ellas es la Ley de Dependencia.

Trasfondo: la sangría de votos continúa

Según las fuentes socialistas consultadas por El Confidencial Digital, tras esta consigna de oposición frontal al Partido Popular se encuentra la honda preocupación que existe en Ferraz: no están siendo capaces de contener la caída en la intención de voto.

En la dirección de la gestora socialista se contaba con pagar una importante ‘factura’ tras la salida de Pedro Sánchez de la ejecutiva y la abstención a la investidura de Mariano Rajoy. Sin embargo, se confiaba en que los efectos de ambas irían disminuyendo con el tiempo.

No ha sido así. En la primera encuesta de 2017 sobre intención de voto –publicada la pasada semana por El Mundo- el PSOE perdía algo más de 3 puntos respecto al mes anterior. Es decir, la sangría de votos sigue creciendo.

 

El propio Javier Fernández ha confesado a su entorno su preocupación por la situación, que también le afecta personalmente en Asturias.

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